/ domingo 17 de enero de 2021

Cruz Azul no despierta y pierde ante Puebla 1-0

La Máquina no lució en su presentación en el Estadio Azteca

De mal en peor, esa es la historia de Cruz Azul en este inicio del 2021. El conjunto cementero no despierta de su pesadilla y anoche sumó su segunda derrota consecutiva del torneo, ahora ante Puebla. La Franja sólo necesitó un gol de Christian Tabó, el mismo que sonó como refuerzo celeste, y durante 80 minutos defendió a muerte su ventaja. Eso fue suficiente porque La Máquina no tuvo idea y fue inoperante en el estadio Azteca. 0-1 final

El conjunto cementero tuvo novedades importantes. Las lesiones volvieron a hacer de las suyas en la institución y tanto Pablo Aguilar como Luis Romo estuvieron fuera de la convocatoria. Por esa razón, la defensa local se vio, al menos en el papel, endeble, con sangre joven, pero inexperta. Jaiber Jiménez y Josué Reyes entraron al quite. En la delantera, de manera sorpresiva, el joven Santiago Giménez fue el titular, mientras que Cabecita Rodríguez esperó en el banquillo de suplentes.

Juan Reynoso se encontró muy rápido con su exequipo y su intención, además de cambiar la imagen que dejaron en la primera jornada, era herirlos por la forma abrupta en la que salió, pero todo fue al revés. Puebla empezó con la intención de atacar y sorprendió.

El conjunto cementero no esperó el juego tan vertical de su rival y en jugada de cuatro toques, de portería a portería, fue como abrieron el marcador. El portero Antony Silva despejó un trazo largo que pasó la media cancha, Santiago Ormeño peinó, Omar Fernández aprovechó su velocidad y mantuvo la posesión.

El colombiano le puso pausa y en el momento exacto asistió a Christian Tabó, quien de tres dedos perforó las redes azules, a pesar de que Jiménez lo trató de incomodar con una barrida. Los dos hombres que sonaron para reforzar a la Máquina se juntaron para anotarle al club al que pudieron llegar en las últimas semana, pero donde quedó en rumores y negociaciones tardías.

Del papel todo pasó a la realidad. La defensa celeste se vio superada con facilidad, no mostraron ninguna resistencia y adoleció a los hombres de experiencia. Así Cruz Azul tuvo que remar contracorriente y su arranque no mejoró en lo más mínimo. Los cementeros no tuvieron ideas, tampoco variantes, se sintieron bastante incómodos en su propia casa. En todas sus líneas les faltó iniciativa. Y no es que Puebla haya sido mejor o dominado a placer el encuentro, pero el ataque celeste no lució, no generaba peligro ni por error. La primera fue hasta la media hora, cuando Yoshimar Yotún desbordó y Orbelín Pineda conectó de manera, precipitada, pero el esférico pasó a centímetros de la cabaña custodiada por un Antony Silva que tenía el uniforme completamente limpio.

Los camoteros siguieron con la intensidad y estuvieron cerca del segundo en su cuenta, pero el mediocampista Salvador Reyes mostró su falta de trabajo en la definición y su disparo salió muy cruzado, cuando ya se cantaba como anotación. Así culminó la primera mitad, con la sorpresa en el electrónico.

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El complemento no cambió en lo absoluto. El técnico peruano encontró en Jonathan Rodríguez a una variante en el ataque y le dio entrada de inmediato, pero el Cabecita no marcó alguna diferencia. Una buena jugada de Santiago Giménez fue desperdiciada por el atacante uruguayo, quien no supo definir estando de frente a la portería. Juan Escobar fue otro que lo intentó, pero su par de disparos fueron bien contenidos por el cancerbero poblano.

La Máquina siguió sin idea, no impuso su juego. Los enfranjados no batallaron, con la ventaja a su favor jugaron con la desesperación del cuadro local, el reloj fue su mejor aliado.

Reynoso probó otra variante, más joven aún. Misael Domínguez entró al campo y de forma muy rápida mostró la magia que tiene en los pies, pero en 25 minutos no pudo hacer mucho. Tampoco lo logró Elías Hernández con toda su experiencia. Todo se complicaba para el cuadro capitalino, que no encontraba la fórmula para festejar un tanto en el Coloso de Santa Úrsula.

Puebla tuvo el oficio suficiente, resistió lo más que pudo y consiguieron tres puntos de oro de visita. Cruz Azul no da una en este año y todavía no lograr sumar en este torneo.

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De mal en peor, esa es la historia de Cruz Azul en este inicio del 2021. El conjunto cementero no despierta de su pesadilla y anoche sumó su segunda derrota consecutiva del torneo, ahora ante Puebla. La Franja sólo necesitó un gol de Christian Tabó, el mismo que sonó como refuerzo celeste, y durante 80 minutos defendió a muerte su ventaja. Eso fue suficiente porque La Máquina no tuvo idea y fue inoperante en el estadio Azteca. 0-1 final

El conjunto cementero tuvo novedades importantes. Las lesiones volvieron a hacer de las suyas en la institución y tanto Pablo Aguilar como Luis Romo estuvieron fuera de la convocatoria. Por esa razón, la defensa local se vio, al menos en el papel, endeble, con sangre joven, pero inexperta. Jaiber Jiménez y Josué Reyes entraron al quite. En la delantera, de manera sorpresiva, el joven Santiago Giménez fue el titular, mientras que Cabecita Rodríguez esperó en el banquillo de suplentes.

Juan Reynoso se encontró muy rápido con su exequipo y su intención, además de cambiar la imagen que dejaron en la primera jornada, era herirlos por la forma abrupta en la que salió, pero todo fue al revés. Puebla empezó con la intención de atacar y sorprendió.

El conjunto cementero no esperó el juego tan vertical de su rival y en jugada de cuatro toques, de portería a portería, fue como abrieron el marcador. El portero Antony Silva despejó un trazo largo que pasó la media cancha, Santiago Ormeño peinó, Omar Fernández aprovechó su velocidad y mantuvo la posesión.

El colombiano le puso pausa y en el momento exacto asistió a Christian Tabó, quien de tres dedos perforó las redes azules, a pesar de que Jiménez lo trató de incomodar con una barrida. Los dos hombres que sonaron para reforzar a la Máquina se juntaron para anotarle al club al que pudieron llegar en las últimas semana, pero donde quedó en rumores y negociaciones tardías.

Del papel todo pasó a la realidad. La defensa celeste se vio superada con facilidad, no mostraron ninguna resistencia y adoleció a los hombres de experiencia. Así Cruz Azul tuvo que remar contracorriente y su arranque no mejoró en lo más mínimo. Los cementeros no tuvieron ideas, tampoco variantes, se sintieron bastante incómodos en su propia casa. En todas sus líneas les faltó iniciativa. Y no es que Puebla haya sido mejor o dominado a placer el encuentro, pero el ataque celeste no lució, no generaba peligro ni por error. La primera fue hasta la media hora, cuando Yoshimar Yotún desbordó y Orbelín Pineda conectó de manera, precipitada, pero el esférico pasó a centímetros de la cabaña custodiada por un Antony Silva que tenía el uniforme completamente limpio.

Los camoteros siguieron con la intensidad y estuvieron cerca del segundo en su cuenta, pero el mediocampista Salvador Reyes mostró su falta de trabajo en la definición y su disparo salió muy cruzado, cuando ya se cantaba como anotación. Así culminó la primera mitad, con la sorpresa en el electrónico.

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El complemento no cambió en lo absoluto. El técnico peruano encontró en Jonathan Rodríguez a una variante en el ataque y le dio entrada de inmediato, pero el Cabecita no marcó alguna diferencia. Una buena jugada de Santiago Giménez fue desperdiciada por el atacante uruguayo, quien no supo definir estando de frente a la portería. Juan Escobar fue otro que lo intentó, pero su par de disparos fueron bien contenidos por el cancerbero poblano.

La Máquina siguió sin idea, no impuso su juego. Los enfranjados no batallaron, con la ventaja a su favor jugaron con la desesperación del cuadro local, el reloj fue su mejor aliado.

Reynoso probó otra variante, más joven aún. Misael Domínguez entró al campo y de forma muy rápida mostró la magia que tiene en los pies, pero en 25 minutos no pudo hacer mucho. Tampoco lo logró Elías Hernández con toda su experiencia. Todo se complicaba para el cuadro capitalino, que no encontraba la fórmula para festejar un tanto en el Coloso de Santa Úrsula.

Puebla tuvo el oficio suficiente, resistió lo más que pudo y consiguieron tres puntos de oro de visita. Cruz Azul no da una en este año y todavía no lograr sumar en este torneo.

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