El día de hoy el futbol mundial se vistió de luto tras la noticia del lamentable fallecimiento de Franz Beckenbauer, legendario defensor alemán que pasó a la historia como uno de los mejores en su posición y además, por ser hasta la fecha el único en haber ganado dos Balones de Oro jugando como defensa.
El legado de Franz en el balompié mundial va más allá de las hazañas y los logros tanto en su etapa como jugador, como de entrenador, por lo que en varias veces tras ver grandes jugadas o momentos en el futbol moderno, llega a la mente todo lo que el Kaiser hizo en su carrera, tal es el caso de la vez que Ramón Morales, destacado mediocampista de las Chivas y la Selección Nacional, jugó con un hombro dislocado, tal y como lo hiciera Beckenbauer en el llamado Juego del Siglo en el Mundial de México 1970.
TE RECOMENDAMOS: Julio César Chávez Jr es detenido en Estados Unidos por posesión ilegal de un arma de fuego
Una de las semifinales de México 1970 vio como Alemania e Italia disputaron en la cancha del estadio Azteca el que hasta hoy es considerado como el mejor partido de futbol que se haya visto, pues además de disputarse por más de 120 minutos el pase a la gran final, en aquella ocasión, Franz Beckenbauer jugó desde el minuto 60 con el hombro dislocado y ante la negativa del jugador a salir del campo, la banca alemana decidió improvisar un cabestrillo con un trapo para tratar de que el brazo afectado no colgara y el defensor jugara con el menor dolor posible.
El momento que vivió la Liga MX en 2003 que recordó a Franz Beckenbauer
La imagen de Franz jugando con visible dolor pasó a la historia y fue recordada en México muchos años después, cuando Ramón Morales tuvo que hacer lo mismo en un duelo de repechaje en el ya lejano Clausura 2003.
Cruz Azul y Chivas jugaban la ida del Repechaje que daba boleto a la Liguilla en el estadio Azul cuando Morales cayó de tal manera que su codo resultó luxado. El cuerpo técnico que en ese entonces comandaba Yayo de la Torre no contaba con cambios, por lo que ante la situación, Ramón decidió seguir jugando a pesar de la lesión, completando los últimos 10 minutos con el brazo inmovilizado, imagen que pasó a la historia con una icónica portada del ESTO que mostró al mexicano al término del encuentro.
Síguenos en Facebook: La Prensa Oficial y en Twitter: @laprensaoem
