LUIS FRANCISCO MACÍAS
ARCHIVOS CRIMINALES
EL DRAMA EMPEZÓ CON UNA BROMA SOBRE UNA PISTOLA DEUTILERÍA
La vida sonreía al actor Enrique Aguilar en 1971. Su carreraera próspera tanto en cine, teatro y televisión. El 31 de enerode aquel año, el actor salió de su domicilio, en Cumbres deMaltrata 213, en la Colonia Narvarte. Vestía un saco sportamarillo a cuadros, pantalón negro, camisa amarilla y corbataverde. Con tal vestimenta grabaría una de las escenas del pilotode la serie de televisión “Reportero de Turno”.
Abordó su automóvil Javelin blanco, modelo 1969. Al filo delas 16:00 horas llegó junto con su secretario a la residencia deConcepción Béistegui 1562, en la Colonia Del Valle, misma que fuefacilitada como locación por la señora Ana María Muro. Allí seencontraban otros artistas que participarían en dicha serie.
Sin pérdida de tiempo, Enrique subió a la planta alta y seencontró con un compañero de trabajo, mismo que le hizo entregade una pistola de utilería. Muy cerca del actor se hallaba lajovencita Ana Luisa, de 15 años de edad, quien escuchó la bromade que era objeto Enrique por parte de su compañero, al decirlesonriente: “Ten cuidado con la pistola porque estácargada”.
Enrique, siguiendo la broma contestó:
-En verdad está cargada, hay que tener mucho cuidado.
Al mismo tiempo, colocaba el arma de juguete sobre la planchadel último barrote de la escalera. En seguida se introdujo a larecámara, seguido de Ana Luisa, que en su afán de entablarplática con el apuesto actor le dijo:
-Esa pistola no puede estar cargada porque es de juguete, lo séporque mis hermanos tienen más de 80 armas, casi todasantiguas.
Al oír eso, el actor, apasionado de las antigüedades –en sucasa poseía una vasta colección de elefantes- le pidió que selas mostrara. Ambos descendieron las escaleras y pasaron a la salade armas. Allí, Ana Luisa tomó un viejo revólver marca Colt,calibre 38, que se encontraba colgado en la pared, entre dos sablesy un escudo más antiguos.
TODO PARECÍA UN ENSAYO
La joven sostenía el revólver en la diestra y muy cerca deella, a menos de un metro de distancia, se encontraba Enrique, depie. Ana Luisa buscaba un polvorín (cuerno que guarda pólvora) y,al efectuar un movimiento brusco para alcanzarlo jalóinconscientemente del gatillo y se escuchó una detonación.
Enrique Aguilar recibió el tiro en el cuello y el proyectillo atravesó para salir a la altura de la nuca del lado derecho.La lesión le produjo una muerte instantánea, pero aun asíEnrique permaneció de pie por algunos segundos para luegodesplomarse sin vida.
La detonación se escuchó en toda la casa, no obstante ello,los allí presentes no le dieron importancia toda vez que pensaronque se trataba del estallido de un petardo o bien del disparo deuna bala de salva.
Sin embargo, varias personas vieron el cuerpo de Enrique tendidoen el piso y corrieron a auxiliarlo, al darse cuenta que sangraba.Algunas de ellas solicitaban los servicios de una ambulancia de laCruz Roja, pero los socorristas de la benemérita institución, asu llegada, se percataron que ya nada podían hacer. El actorhabía dejado de existir.
Uno de los testigos principales de aquel drama fue la actrizMartha Zavaleta, quien declaró que se encontraba sentada en laescalera cuando se percató que Ana Luisa mostraba el arma al actory que en ese momento escuchó la detonación. “Luego vi cuandoEnrique cayó al piso”.
La noticia circuló como reguero de pólvora y en pocos minutosuna muchedumbre se arremolinó frente a la residencia.
Minutos más tarde llegaron más compañeros de Enrique Aguilar,quien en aquellos días era auxiliar de la oficina de prensa de laAsociación Nacional de Actores.
Los primeros en arribar fueron Oscar Morelli, Joaquín Cordero,Luz María Aguilar, Miguel Córcega, Mario Sergio del Río, HéctorGómez y Raúl Astor.
A las 20:00 horas de aquel domingo fatídico, y acompañado deun amigo, llegó el padre de Enrique, señor Domingo AguilarChávez, casado con la señora María de Lourdes Bretón.
Entró a la casa, fue informado del lamentable accidente y tresminutos después abandonó el inmueble, profundamente conmovido,pálido y demacrado.
Al ser entrevistado por LA PRENSA sólo alcanzó a decir en vozmuy baja: “Era un hijo ejemplar y se encontraba en el mejormomento de su vida; no sé qué voy a hacer sin él”. Acontinuación abordó un automóvil y se retiró.
EL CRIMINÓLGO MIGUEL GILBÓN MAITRET HIZO LA AUTPSIA
La señora Ana Luisa Muro viuda de Benítez, madre de lapresunta homicida, no se encontraba en los momentos de ocurrir latragedia. Llegó a las 19:00 horas. Treinta minutos después, lajoven salió de su residencia acompañada de cuatro agentes.
Fue conducida a las oficinas de la Octava Delegación, en donderindió su declaración.
Y en las primeras horas de la mañana del lunes 1 de febrero-1971-, Ana Luisa ingresó al Tribunal para Menores. De acuerdo conlos análisis hechos por peritos y médicos legistas, la jovencitadisparó a menos de 30 centímetros y más de 10 de distancia delcuello de Enrique Aguilar.
La autopsia fue llevada a cabo por los médicos legistas MiguelGilbón Maitret, director del Semefo, y el doctor José Luis delHierro. Estuvo como observador el doctor Ramón Fernández Pérez,director del laboratorio de investigación y criminalístia de laProcuraduría.
La muerte del actor fue instantánea, dijeron los legistas. Labala, calibre .38 milímetros destrozó la segunda vértebracervical. Quedó unos instantes de pie, y cuando cayó, estabamuerto. La chica declaró que ella tenía el revólver en ladiestra y cuando volteaba para poner un cuerno con pólvora sobreun buró, se produjo el disparo.
LA PRUEBA DE LA PARAFINA
Peritos del laboratorio de criminalística de la Procuraduríade Justicia del Distrito, le practicaron la prueba de la parafinaen ambas manos a la infortunada joven, Ana Luisa Benítez. De sulado no se apartaba ni un solo momento su madre, quien pedía a losreporteros gráficos no imprimir sus placas porque la joven seencontraba sumamente nerviosa.
El informe también reveló que la prueba de la parafina leresultó a Enrique negativa en ambas manos, pero positiva en elcuello. Allí le hallaron los expertos dos gránulos depólvora.
Ana Luisa resultó con la prueba de la parafina positiva en lamano derecha. "Tenía nitratos en la zona típica de revólver, esdecir, en la región superior de los dedos pulgar e índice, asícomo palmar de la mano derecha", informaron los peritos.
Una vez recluida en el Tribunal para Menores, la joven recibióla visita de su madre y hermanos. Platicó con ellos. La chica seencontraba traumatizada. Era una terrible pesadilla la sufría.
Le fue practicado un exámen médico general, un psiquiátrico yun estudio sociológico.
Por otra parte, sus abogados dijeron que debido a que Ana Luisaera mayor de edad, contaba con la protección de la ley, queseñala que los menores son imputables.
La joven declaró que cuando se produjo la detonación habíavarias personas en el primer piso de su casa, sin embargo, dijo quedesconocía si alguna de ellas se dio cuenta de la forma en queocurrieron los hechos.
Por su parte, el director artístico, Pepe Junco, dijo a LAPRENSA que en la recámara donde quedó muerto Enrique Aguilar,había de 5 a 8 personas.
COMPAÑEROS ACTORES RECIBIERON EL CUERPO
La conmoción en el medio artístico no se hizo esperar.Artistas como Luz María Aguilar hicieron acto de presencia en losservicios funerarios.
Por su parte, la actriz Martha Zavaleta, explicó que llegó ala casa de Concepción Béistegui, donde se llevaban a cabo lasgrabaciones, a las 7:00 horas.
Se percató la actriz que cerca de las 16:00 horas, Ana Luisaplaticaba con Enrique Aguilar acerca de una pistola y, después,subieron a la recámara y vio a la joven muy sonriente y que teníauna pistola en la mano. Momentos después escuchó la detonación yvio que Enrique caía. Ana Luisa daba gritos. El señor ArtutoSchoening Peralta -amigo de Martha Zavaleta- subió a calmarla ydeclaró que consideraba todo un accidente.
El cuerpo del actor fue entregado a Óscar Morelli y HéctorGómez, representantes de la ANDA, y dos familiares del actorinfortunado. Dijeron que habían hablado con los padres de su amigoy compañero de trabajo, quienes no pidieron ninguna acción penalcontra la joven Ana Luisa. Estaban convencidos de que ella no tuvoninguna culpa.
Y se dijo que muy pronto recuperaría su libertad Ana Luisa, alcomprobarse que la tragedia fue resultado de un lamentableaccidente, aunque la joven quedaría traumatizada por la amargaexperiencia vivida en aquella casa y en su paso por el tutelar.
Por otra parte, se supo que uno de los abogados de la jovencitaAna Luisa Benítez Muro fue consignado por la Procuraduría a laCárcel Preventiva, por entorpecer las investigaciones.
José Luis Curiel fue acusado por dos agentes de la PolicíaJudicial de secuestrarlos durante varias horas e impedir que seavocaran a la investigación de los hechos en que perdió la vidael actor. Días después quedaría en libertad.
ENSAYABA LA OBRA "SUITE 202"
El actor recibió cristiana sepultura en el Panteón Jardín.Hasta su última morada fue despedido por familiares y amigos. Almomento de su muerte Enrique trabajaba en el programa detelevisión "La Cosquilla", que conducía Raúl Astor. Ensayabatambién para trabajar en la obra teatral, "Suite 202", conJoaquín Cordero y Blanca Sánchez. Su trayectoria como actor detelenovelas y en cine era brillante.
Enrique Aguilar Bretón era soltero y contaba al morir con 36años de edad.
Un acontecimiento emotivo fue cuando su madre, María LuisaBretón recibió, en representación de su hijo, un reconocimientopost mortem por su trayectoria artística, de manos del profesorAlfredo Ruiz del Río, quien entonces era presidente de laAsociación Mexicana de Periodistas de Radio y Televisión, laAMPRyT. El conductor de televisión, Raúl Velasco, fungió comomaestro de ceremonias durante la premiación dentro de su programa"Siempre en Domingo".
Y hasta aquí, esta historia.
TRAYECTORIA DEL ACTOR
TELENOVELAS:
"Aventura" (1970)
"Encrucijada" (1970)
"Mariana" (1970)
"La Familia " (1969)
"El Ruiseñor" (1969)
Las Impuras (1969)
"Aurelia" (1968)
"Fallaste corazón" (1968)
"Atormentada" (1967)
"La Casa de las fieras" (1967)
"Ellas" (1967)
"La Duquesa" (1966)
"La Sombra del pecado" (1966)
"Marina Lavalle" (1965)
"El Dolor de vivir" (1964)
"México 1900" (1964)
"Siempre tuya" (1964)
"El Profesor Valdez" (1962)
PELÍCULAS:
"Confesiones de una adolescente" (1970)
"Una Noche bajo la tormenta" (1969)
"El Día de las madres" (1969)
"La Maestra inolvidable" (1968
"El Escapulario" (1966)
"Viento negro" (1965)
"La Culpa de los padres" (1963)
"Los Signos del zodiaco" (1962)
"800 leguas por el Amazonas" (1958)
"La Jangada" (1958)
Textos y consulta hemerográfica:
LUIS FRANCISCO MACÍAS
