/ domingo 1 de septiembre de 2019

Y qué nos van a informar

No se cumple un año de gobierno, pero si es hora del primer informe de gobierno, al menos a nivel federal, hay muchas cosas que no han tomado su rumbo, pero apenas van nueve meses, déjenlo gobernar, dicen sus fieles seguidores. Démosle el beneficio de la duda (aún más).

Sin embargo, en la capital mexicana, hay aún menos qué informar, si, es verdad que los programas sociales están fluyendo con mejor orden y con mucha más puntualidad que a nivel federal, la jefa ha tenido suficientes reflectores como para que así se vea, pero el tema pendiente es la seguridad.

Y es que desde que inició el gobierno de la doctora, cada mes es más violento que el anterior, los delitos de alto impacto siguen a la alza como espuma de cerveza mal servida, homicidios, robos violentos y secuestro, de los que más se cometen al día.

Antes de que salgan con que se trata de el efecto cucaracha, debido a la estrategia del gobierno federal, hay que aclarar que más que nada parece que los ratones se dieron cuenta que el gato es medio pendejo y que pueden hacer fiesta a sus anchas.

Es decir, los mismos cárteles que operan a diestra y siniestra el reparto de drogas al menudeo (¿?) extorsión, secuestro y demás ilícitos relacionados ahora perdieron el pudor y operan a plena luz del día bajo la ineficacia, o tolerancia de la Policía Capitalina, vaya usted a saber si es que están coludidos o sobrepasados, cualquiera de las dos es muy posible.

Luego de las manifestaciones violentas, ahora resulta que a la científica no le quedó de otra que hacer su “frankie” con los granaderos que desapareció de un plumazo hace nueve meses, o sea, va a ser la misma gata, pero revolcada. Mejor hubiera sido desde entonces que les cambiara el nombre, porque capacitación para contener multitudes la tenían. Sí, es verdad que a veces se les pasaba la mano, pero no era siempre.

Si de verdad la 4T es honesta como dice, el verdadero informe de la Jefa de Gobierno debería versar en torno a las estrategias fallidas y si, así con la aprobación que llegó, quizá la ciudadanía le permita recomponer el rumbo y comenzar de nuevo a “salvar la ciudad” de los gobiernos anteriores, que dicho sea de paso, salieron del mismo grupúsculo de amigos de la izquierda de la capital.

No se cumple un año de gobierno, pero si es hora del primer informe de gobierno, al menos a nivel federal, hay muchas cosas que no han tomado su rumbo, pero apenas van nueve meses, déjenlo gobernar, dicen sus fieles seguidores. Démosle el beneficio de la duda (aún más).

Sin embargo, en la capital mexicana, hay aún menos qué informar, si, es verdad que los programas sociales están fluyendo con mejor orden y con mucha más puntualidad que a nivel federal, la jefa ha tenido suficientes reflectores como para que así se vea, pero el tema pendiente es la seguridad.

Y es que desde que inició el gobierno de la doctora, cada mes es más violento que el anterior, los delitos de alto impacto siguen a la alza como espuma de cerveza mal servida, homicidios, robos violentos y secuestro, de los que más se cometen al día.

Antes de que salgan con que se trata de el efecto cucaracha, debido a la estrategia del gobierno federal, hay que aclarar que más que nada parece que los ratones se dieron cuenta que el gato es medio pendejo y que pueden hacer fiesta a sus anchas.

Es decir, los mismos cárteles que operan a diestra y siniestra el reparto de drogas al menudeo (¿?) extorsión, secuestro y demás ilícitos relacionados ahora perdieron el pudor y operan a plena luz del día bajo la ineficacia, o tolerancia de la Policía Capitalina, vaya usted a saber si es que están coludidos o sobrepasados, cualquiera de las dos es muy posible.

Luego de las manifestaciones violentas, ahora resulta que a la científica no le quedó de otra que hacer su “frankie” con los granaderos que desapareció de un plumazo hace nueve meses, o sea, va a ser la misma gata, pero revolcada. Mejor hubiera sido desde entonces que les cambiara el nombre, porque capacitación para contener multitudes la tenían. Sí, es verdad que a veces se les pasaba la mano, pero no era siempre.

Si de verdad la 4T es honesta como dice, el verdadero informe de la Jefa de Gobierno debería versar en torno a las estrategias fallidas y si, así con la aprobación que llegó, quizá la ciudadanía le permita recomponer el rumbo y comenzar de nuevo a “salvar la ciudad” de los gobiernos anteriores, que dicho sea de paso, salieron del mismo grupúsculo de amigos de la izquierda de la capital.

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