/ domingo 7 de febrero de 2021

¿Y ahora qué?

Después de muchas, y evidentes fallas, en el sistema de registro para que los adultos mayores puedan recibir su vacuna después de varios días comenzó a medio funcionar, pero la manera en qué van a contactar a los interesados aún es incierta, además, vislumbra un gran problema cuando el grueso de la población se tenga que registrar.

Y es que el registro es sumamente sencillo, el CURP, de donde suponemos retoma todos los datos, dos teléfonos y dos correos, sin embargo, aún no está caro a partir de cuándo van a llamar, ni cuándo van a empezar a vacunar y mucho menos con que cantidad de vacunas van a empezar por localidad. Es decir, no se sabe nada y el gobierno tampoco ha hecho nada por explicarlo.

Aunque antes de estas interrogantes viene una más sencilla, ¿ya hay vacunas? ¿O por lo menos compromiso de compra y entrega? Porque es muy fácil formarlos a todos y ponerlos en una bonita lista para que al final no haya vacunas y no solo se trata de si están compradas o no, sino de que haya la disponibilidad y que esta sea la adecuada para cada sector de la población.

Hace falta claridad en la manera en que van a hacer las cosas, pues si en la población de 60 y más, que no son el grueso de la población, hay estos problemas no quiero pensar que va a pasar cuando entremos los de 30-60, a este paso, lo dice un meme, vamos a heredar el turno de la vacuna pues no nos va a alcanzar la vida para esperarla.

Mientras tanto, la vida sigue parada, si bien, los comercios ya retoman mañana sus actividades con todas (espero) las medidas de seguridad para frenar los contagios, las escuelas y actividades recreativas están detenidas, y no, no es por salir a hacer fiesta, es porque también ellos comen.

Abrir o morir fue el lema de los restauranteros al que se sumaron otros gremios y es que es real, o se abre o se pierde todo, porque no hubo apoyo desde el inicio, porque solo se les cerró todo a rajatabla sin siquiera pensar en las consecuencias, o si las pensaron, quizá creían que duraría solo un mes.

Cosa que fue ridícula, pues si en el mero centro de la pandemia la crisis duró muchos meses, que les hacía pensar que en el país sería diferente, aquí como se dice por ahí será la historia la que juzgue las acciones de los gobernantes, y les dé su lugar, si es que hicieron bien, o no.

Después de muchas, y evidentes fallas, en el sistema de registro para que los adultos mayores puedan recibir su vacuna después de varios días comenzó a medio funcionar, pero la manera en qué van a contactar a los interesados aún es incierta, además, vislumbra un gran problema cuando el grueso de la población se tenga que registrar.

Y es que el registro es sumamente sencillo, el CURP, de donde suponemos retoma todos los datos, dos teléfonos y dos correos, sin embargo, aún no está caro a partir de cuándo van a llamar, ni cuándo van a empezar a vacunar y mucho menos con que cantidad de vacunas van a empezar por localidad. Es decir, no se sabe nada y el gobierno tampoco ha hecho nada por explicarlo.

Aunque antes de estas interrogantes viene una más sencilla, ¿ya hay vacunas? ¿O por lo menos compromiso de compra y entrega? Porque es muy fácil formarlos a todos y ponerlos en una bonita lista para que al final no haya vacunas y no solo se trata de si están compradas o no, sino de que haya la disponibilidad y que esta sea la adecuada para cada sector de la población.

Hace falta claridad en la manera en que van a hacer las cosas, pues si en la población de 60 y más, que no son el grueso de la población, hay estos problemas no quiero pensar que va a pasar cuando entremos los de 30-60, a este paso, lo dice un meme, vamos a heredar el turno de la vacuna pues no nos va a alcanzar la vida para esperarla.

Mientras tanto, la vida sigue parada, si bien, los comercios ya retoman mañana sus actividades con todas (espero) las medidas de seguridad para frenar los contagios, las escuelas y actividades recreativas están detenidas, y no, no es por salir a hacer fiesta, es porque también ellos comen.

Abrir o morir fue el lema de los restauranteros al que se sumaron otros gremios y es que es real, o se abre o se pierde todo, porque no hubo apoyo desde el inicio, porque solo se les cerró todo a rajatabla sin siquiera pensar en las consecuencias, o si las pensaron, quizá creían que duraría solo un mes.

Cosa que fue ridícula, pues si en el mero centro de la pandemia la crisis duró muchos meses, que les hacía pensar que en el país sería diferente, aquí como se dice por ahí será la historia la que juzgue las acciones de los gobernantes, y les dé su lugar, si es que hicieron bien, o no.

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