Habrá tener claro el objetivo, la recuperación económica pasa necesariamente por la creación de empleos, los que se perdieron durante la crisis, además de impulsar nuevos, no hay que perder de vista lo importante.
Los resultados de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares publicada recientemente por el INEGI, deben ser un indicador para emprender acciones que lleven al bienestar de las familias, con base en proyectos productivos más allá de los programas compensatorios.
En la referida encuesta se da cuenta de la disminución en la Ciudad de México del ingreso familiar de más del 20%, cifra que se compara desfavorablemente respecto de la disminución registrada a nivel nacional de cerca del 6%.
La cifra revela la insuficiencia de las políticas sociales aplicadas en la capital del país y demuestra que sin crecimiento y sin empleos no hay política social que alcance.
Llámese becas, apoyos o como se les quiera denominar, los programas compensatorios deben ser transitorios para algunos sectores que están en posibilidades de laborar.
Hace unos días, la Coparmex CDMX dio cuentan del ritmo lento de la reactivación, lo cual impacta en el empleo, porque “si bien en octubre se reportaron 26 mil 453 nuevos puestos de trabajo, se registra una pérdida de más de 135 mil puestos respecto de febrero de 2020, mes previo al inicio de la emergencia sanitaria”, lo cual significa una brecha laboral de 35 por ciento.
Es necesario enfocarse en mantener los empleos y generar acciones de ayuda mutua, entre autoridades, empresarios y sociedad civil para que evitar más cierres de fuentes de trabajo.
El gran pendiente, es una reactivación económica que ayude a recuperar los empleos perdidos y generar nuevos.
Urge dejar de un lado las diferencias partidistas y de grupos para impulsar una agenda legislativa desde el Congreso de la Ciudad de México cuya prioridad sea la reactivación económica y la recuperación de los empleos.
Para ello se necesita una política laboral enfocada al fomento del empleo y una financiera que contemple incentivos a la creación de fuentes de empleo.
También hay que involucrar a las alcaldías para aprovechar las características y riquezas de cada demarcación, así como los conocimientos y destrezas de sus pobladores.
La Ciudad de México se caracteriza por la nobleza, hospitalidad y su gente trabajadora.
Y no hay que perder de vista el modelo de cooperativas el cual podría funcionar en algunos casos.
Lo conveniente para los capitalinos es que quienes tomas las decisiones en la conducción de la metrópoli trabajen unidos en la generación de acciones concretas desde el Gobierno de la Ciudad y desde el Congreso local, las cuales aseguren un crecimiento económico real y la recuperación de los empleos perdidos que tanta falta le hacen a las familias.
Textualmente hay que decirlo: lo que es verdaderamente importante tiene que ver con la recuperación de empleos, la reactivación económica y la creación de las mejores condiciones para la generación de más y mejores fuentes de empleo, desde los modelos empresariales o cooperativas.
@TXTUALes
