/ domingo 25 de julio de 2021

Un semáforo descolorido…


Durante las próximas dos semanas, Ciudad de México, pasará del semáforo amarillo al naranja, junto con otras entidades del país. Sin embargo aún si llegáramos al color rojo, no habrá medidas de aislamiento y confinamiento social, acciones que ya se están tomando en diversas ciudades del mundo

Al mismo tiempo, la prensa norteamericana y canadiense, advierte a sus ciudadanos que los destinos turísticos mexicanos de Los Cabos y Cancún sufren por el embate de la tercera ola de Covid19 y que sus hospitales, están por saturarse. Por su parte, México insiste en no tomar medidas adicionales como hacer pruebas de Covid19 a los turistas o vigilarlos, durante su estancia en el país.

En Palacio Nacional, el Presidente López Obrador no escucha o no sabe qué hacer e insiste en el regreso presencial a clases pensando no en la salud de los niños, sino por un lado en la reapertura de miles de comercios que viven de las escuelas, así como en el regreso de las mujeres al terreno laboral, hoy impedidas de hacerlo, ya que están al cuidado de los niños. Su estrategia es regresar a donde estaba el país, antes de la pandemia

Es evidente que no hay un plan de reactivación económica, como el que ya está elaborando Estados Unidos, Europa e incluso China que apostarán carbonatado por las energías renovables y la inversión en infraestructura tradicional como puentes y carreteras, así como en telecomunicaciones

México también podría recuperar la senda del crecimiento y salir fortalecido, si llevara a cabo subastas eléctricas, retomara las subastas petroleras, implementara un plan de créditos empresariales con garantías otorgadas por el Gobierno Federal, desarrollara nuevas autopistas oceánicas que conecten desde Puerto Peñasco hasta Puerto Chiapas , y de Tampico hasta Campeche, entre otras acciones

En el terreno fiscal, México debería aprovechar su cercanía y el mismo uso horario que Estados Unidos, para atraer corporativos de ese país, que aprovechar los tratados de doble tributación, decidir poner sus oficinas en México en el lugar de Estados Unidos. Para ello, debería bajar la tasa del ISR al 18% y obtendría, más dinero, empleos e inversiones, que mantener una elevada tasa de ISR que provoca informalidad y evasión fiscal constante

Como en cualquier crisis, el COVID19 puede ser una oportunidad para cambiar y mejorar, o bien, puede no hacerse nada y habrá un bajo crecimiento económico en los próximos años


Durante las próximas dos semanas, Ciudad de México, pasará del semáforo amarillo al naranja, junto con otras entidades del país. Sin embargo aún si llegáramos al color rojo, no habrá medidas de aislamiento y confinamiento social, acciones que ya se están tomando en diversas ciudades del mundo

Al mismo tiempo, la prensa norteamericana y canadiense, advierte a sus ciudadanos que los destinos turísticos mexicanos de Los Cabos y Cancún sufren por el embate de la tercera ola de Covid19 y que sus hospitales, están por saturarse. Por su parte, México insiste en no tomar medidas adicionales como hacer pruebas de Covid19 a los turistas o vigilarlos, durante su estancia en el país.

En Palacio Nacional, el Presidente López Obrador no escucha o no sabe qué hacer e insiste en el regreso presencial a clases pensando no en la salud de los niños, sino por un lado en la reapertura de miles de comercios que viven de las escuelas, así como en el regreso de las mujeres al terreno laboral, hoy impedidas de hacerlo, ya que están al cuidado de los niños. Su estrategia es regresar a donde estaba el país, antes de la pandemia

Es evidente que no hay un plan de reactivación económica, como el que ya está elaborando Estados Unidos, Europa e incluso China que apostarán carbonatado por las energías renovables y la inversión en infraestructura tradicional como puentes y carreteras, así como en telecomunicaciones

México también podría recuperar la senda del crecimiento y salir fortalecido, si llevara a cabo subastas eléctricas, retomara las subastas petroleras, implementara un plan de créditos empresariales con garantías otorgadas por el Gobierno Federal, desarrollara nuevas autopistas oceánicas que conecten desde Puerto Peñasco hasta Puerto Chiapas , y de Tampico hasta Campeche, entre otras acciones

En el terreno fiscal, México debería aprovechar su cercanía y el mismo uso horario que Estados Unidos, para atraer corporativos de ese país, que aprovechar los tratados de doble tributación, decidir poner sus oficinas en México en el lugar de Estados Unidos. Para ello, debería bajar la tasa del ISR al 18% y obtendría, más dinero, empleos e inversiones, que mantener una elevada tasa de ISR que provoca informalidad y evasión fiscal constante

Como en cualquier crisis, el COVID19 puede ser una oportunidad para cambiar y mejorar, o bien, puede no hacerse nada y habrá un bajo crecimiento económico en los próximos años