/ viernes 19 de febrero de 2021

The Morning Show y el acoso laboral

The Morning Show es una serie que abarca un tema que se ha convertido en top de las redes sociales y la opinión pública: el acoso laboral que germina, en este caso, en un ambiente dominado por hombres en la cúspide de la pirámide y en muchas áreas clave de una empresa y en el que los trabajadores normalizan la sujeción sutil de las mujeres hacia quienes detentan el verdadero poder y las conduce a formas de actuar en la que hechos de discriminación o violencia sexual son tolerados o pasados por alto incluso entre las propias mujeres.

La historia retrata la vida de una conductora estrella Alex Levy, interpretada por Jennifer Aniston, quien ha llenado la pantalla de los fans del teleshow matutino, a través de la proyección de una personalidad sencilla y “femenina”, que complementa la de su pareja en la conducción, un hombre entrado en sus cincuentas Mitch Kessler (Steve Carell).

La serie inicia con la explosiva noticia de que Kessler ha sido acusado de abuso hacia una ex empleada de la televisora generando tal presión en la opinión pública que los ejecutivos del canal deciden suspender su contrato y echarlo de la empresa, “curándose en salud” para evitar compartir la responsabilidad del comportamiento del conductor y salvar a la empresa de una caída entre sus anunciantes.

Kessler recrimina a la empresa y a sus propios ex compañeros la forma en que ha sido acusado y el entorno de linchamiento, generado en sus propias palabras por el movimiento MeToo, que presiona a la opinión pública para dar por ciertos hechos que él niega.

A lo largo de la serie, sin embargo, empieza a revelarse el elefante en la sala, es decir, se descubre que dichos comportamientos de la estrella del teleshow no sólo eran tolerados, sino conocidos en la empresa y hasta cubiertos por los directivos más encumbrados.

Se suceden confesiones y rumores acerca de otras mujeres que fueron presionadas o utilizadas por Kessler y quienes callaron acerca de los hechos por vergüenza o por mantener su trabajo en la televisora.

Una de las cosas más interesantes del programa es la transformación de Levy, quien si bien en un principio se solidariza con la situación de su coestrella, finalmente, con la llegada a la empresa de una periodista audaz, Bradley Jackson (Rees Witherspoon) y el sucidio de una de las víctimas de Kessler, termina en una catarsis que la obliga a reconocer la tolerancia que la empresa tuvo con las conductas de su compañero de show y el ambiente de acoso que tiene impregnada a la televisora.

Vale mucho la pena asomarse a esta historia para entender lo complejo que puede ser el acoso y cómo, de manera subrepticia e inclusive silenciosa, se va normalizando en las empresas, instituciones y en la sociedad misma.

The Morning Show es una serie que abarca un tema que se ha convertido en top de las redes sociales y la opinión pública: el acoso laboral que germina, en este caso, en un ambiente dominado por hombres en la cúspide de la pirámide y en muchas áreas clave de una empresa y en el que los trabajadores normalizan la sujeción sutil de las mujeres hacia quienes detentan el verdadero poder y las conduce a formas de actuar en la que hechos de discriminación o violencia sexual son tolerados o pasados por alto incluso entre las propias mujeres.

La historia retrata la vida de una conductora estrella Alex Levy, interpretada por Jennifer Aniston, quien ha llenado la pantalla de los fans del teleshow matutino, a través de la proyección de una personalidad sencilla y “femenina”, que complementa la de su pareja en la conducción, un hombre entrado en sus cincuentas Mitch Kessler (Steve Carell).

La serie inicia con la explosiva noticia de que Kessler ha sido acusado de abuso hacia una ex empleada de la televisora generando tal presión en la opinión pública que los ejecutivos del canal deciden suspender su contrato y echarlo de la empresa, “curándose en salud” para evitar compartir la responsabilidad del comportamiento del conductor y salvar a la empresa de una caída entre sus anunciantes.

Kessler recrimina a la empresa y a sus propios ex compañeros la forma en que ha sido acusado y el entorno de linchamiento, generado en sus propias palabras por el movimiento MeToo, que presiona a la opinión pública para dar por ciertos hechos que él niega.

A lo largo de la serie, sin embargo, empieza a revelarse el elefante en la sala, es decir, se descubre que dichos comportamientos de la estrella del teleshow no sólo eran tolerados, sino conocidos en la empresa y hasta cubiertos por los directivos más encumbrados.

Se suceden confesiones y rumores acerca de otras mujeres que fueron presionadas o utilizadas por Kessler y quienes callaron acerca de los hechos por vergüenza o por mantener su trabajo en la televisora.

Una de las cosas más interesantes del programa es la transformación de Levy, quien si bien en un principio se solidariza con la situación de su coestrella, finalmente, con la llegada a la empresa de una periodista audaz, Bradley Jackson (Rees Witherspoon) y el sucidio de una de las víctimas de Kessler, termina en una catarsis que la obliga a reconocer la tolerancia que la empresa tuvo con las conductas de su compañero de show y el ambiente de acoso que tiene impregnada a la televisora.

Vale mucho la pena asomarse a esta historia para entender lo complejo que puede ser el acoso y cómo, de manera subrepticia e inclusive silenciosa, se va normalizando en las empresas, instituciones y en la sociedad misma.

ÚLTIMASCOLUMNAS
viernes 01 de octubre de 2021

Otra incongruencia legislativa

VÍA LEGAL 

Maria Fernanda Matus Martinez

viernes 24 de septiembre de 2021

Otra ley deficiente

VÍA LEGAL

Maria Fernanda Matus Martinez

viernes 03 de septiembre de 2021

No desaparecen

VÍA LEGAL

Maria Fernanda Matus Martinez

viernes 06 de agosto de 2021

Somos

VÍA LEGAL

Maria Fernanda Matus Martinez

viernes 30 de julio de 2021

Pegasus Project

VÍA LEGAL

Maria Fernanda Matus Martinez

viernes 23 de julio de 2021

Necesito un abogado

VÍA LEGAL 

Maria Fernanda Matus Martinez

Cargar Más