/ viernes 5 de agosto de 2022

TEXTUAL-es | El trabajo es un derecho

Se deben crear las condiciones para que todas las personas tengan un empleo digno, justamente remunerado, ese fue el sueño del maestro José Dávalos Morales (QEPD). Su legado está en cada uno de los alumnos, en 54 años de cátedra en la Facultad de Derecho de la UNAM y en los trabajadores que conoció de la protección de la ley, a través de su columna Justicia en el Trabajo.

En una de sus entregas de su columna, el maestro Dávalos Morales, apuntó: el gobierno y los patrones debe crear oportunidades de trabajo para las personas trabajadoras sin distinción de ninguna especie; se les debe garantizar a que reciban un salario justo conforme a sus capacidades, obligaciones y necesidades.

Y agregó: el trabajo es un derecho y no artículo de comercio.

Extrañaremos su visión del tema laboral, más ahora que, la histórica pérdida del empleo en México puede traer tiempos más complicados que los de la pandemia y, al Gobierno Federal no parece importarle o no lo entiende.

Si hay menos empleo habrá menos contribuyentes y, en consecuencia, no tendrá recursos para sus programas compensatorios o clientelares, como se les quiera llamar.

Deberíamos tener claro que, quien trabaja no debería ser pobre, sin embargo, en México, las personas no cubren sus necesidades elementales con un sueldo.

Con base en el estudio El desempeño del mercado laboral mexicano: potencial sin aprovechar, realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), durante el primer trimestre de 2022 la población ocupada perdió más de medio millón de trabajadores, por lo que tuvo una caída trimestral de (-)0.9%. La disminución se debió totalmente a la eliminación de más de 600 mil empleos informales; la población ocupada formal agregó 100 mil personas.

Además de la pérdida trimestral de empleo, la brecha laboral de 22.3% en el periodo muestra que 2 de cada 10 personas que podrían estar trabajando aportaron pocas o nulas horas laborales a la economía. El potencial no aprovechado de la fuerza laboral es de 14.6 millones de mexicanos.

Las cifras son indicadores de la falta de una política de protección y fomento del empleo en México, donde se carece de dirección y estímulos fiscales para la creación de lugares de trabajo.

La tasa de desocupación nacional durante el primer trimestre del 2022 fue de 3.45%, es decir, casi 4 de cada 100 mexicanos en la Población Económicamente Activa no encontró trabajo. Mientras que, la población subocupada representa el 8.9% de la población que trabaja en el país, lo cual se traduce en 5 millones 21 mil 419 mexicanos con empleo, pero que quieren trabajar una mayor cantidad de horas. Los estados cuya problemática de subocupación es más fuerte son Tlaxcala, Oaxaca y Ciudad de México, con una tasa promedio de 15.3%.

Textualmente hay que decirlo: El mercado laboral no genera empleo suficiente para la fuerza laboral capacitada. Habrá que retomar el llamado del maestro Dávalos Morales: Gobierno, trabajadores, patrones y la sociedad en su conjunto, deben estar comprometidos en hacer realidad la idea del trabajo decente o digno.

@TXTUALes

Se deben crear las condiciones para que todas las personas tengan un empleo digno, justamente remunerado, ese fue el sueño del maestro José Dávalos Morales (QEPD). Su legado está en cada uno de los alumnos, en 54 años de cátedra en la Facultad de Derecho de la UNAM y en los trabajadores que conoció de la protección de la ley, a través de su columna Justicia en el Trabajo.

En una de sus entregas de su columna, el maestro Dávalos Morales, apuntó: el gobierno y los patrones debe crear oportunidades de trabajo para las personas trabajadoras sin distinción de ninguna especie; se les debe garantizar a que reciban un salario justo conforme a sus capacidades, obligaciones y necesidades.

Y agregó: el trabajo es un derecho y no artículo de comercio.

Extrañaremos su visión del tema laboral, más ahora que, la histórica pérdida del empleo en México puede traer tiempos más complicados que los de la pandemia y, al Gobierno Federal no parece importarle o no lo entiende.

Si hay menos empleo habrá menos contribuyentes y, en consecuencia, no tendrá recursos para sus programas compensatorios o clientelares, como se les quiera llamar.

Deberíamos tener claro que, quien trabaja no debería ser pobre, sin embargo, en México, las personas no cubren sus necesidades elementales con un sueldo.

Con base en el estudio El desempeño del mercado laboral mexicano: potencial sin aprovechar, realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), durante el primer trimestre de 2022 la población ocupada perdió más de medio millón de trabajadores, por lo que tuvo una caída trimestral de (-)0.9%. La disminución se debió totalmente a la eliminación de más de 600 mil empleos informales; la población ocupada formal agregó 100 mil personas.

Además de la pérdida trimestral de empleo, la brecha laboral de 22.3% en el periodo muestra que 2 de cada 10 personas que podrían estar trabajando aportaron pocas o nulas horas laborales a la economía. El potencial no aprovechado de la fuerza laboral es de 14.6 millones de mexicanos.

Las cifras son indicadores de la falta de una política de protección y fomento del empleo en México, donde se carece de dirección y estímulos fiscales para la creación de lugares de trabajo.

La tasa de desocupación nacional durante el primer trimestre del 2022 fue de 3.45%, es decir, casi 4 de cada 100 mexicanos en la Población Económicamente Activa no encontró trabajo. Mientras que, la población subocupada representa el 8.9% de la población que trabaja en el país, lo cual se traduce en 5 millones 21 mil 419 mexicanos con empleo, pero que quieren trabajar una mayor cantidad de horas. Los estados cuya problemática de subocupación es más fuerte son Tlaxcala, Oaxaca y Ciudad de México, con una tasa promedio de 15.3%.

Textualmente hay que decirlo: El mercado laboral no genera empleo suficiente para la fuerza laboral capacitada. Habrá que retomar el llamado del maestro Dávalos Morales: Gobierno, trabajadores, patrones y la sociedad en su conjunto, deben estar comprometidos en hacer realidad la idea del trabajo decente o digno.

@TXTUALes