Es un gran problema el de la falta de sanitarios en las instalaciones bancarias, la gente hace filas en las ventanillas donde se ofrecen los servicios bancarios, la espera es de quince minutos, media hora, una hora o más; los ruegos insistentes de los clientes urgidos de acudir a un baño son inútiles; los servicios sanitarios son para el personal de la institución, para nadie más, es la respuesta.
Por lo general, los lugares en donde se concentran personas, hay servicios sanitarios, hasta en los mercados más modestos hay baños para la población que acude a ellos, es un servicio con el que tienen que contar todos los lugares a donde acude la gente a solicitar la atención de alguna necesidad. Pensándolo bien, no puede haber alguna concentración de personas sin sanitarios.
El problema no se presenta sólo en las grandes ciudades; esta necesidad es general en los bancos. Cómo hace falta que las autoridades intervengan ante esta necesidad de la población. Todos los días tienen que hacer frente a este requerimiento hombres y mujeres de todas las edades.
El problema lo abordo no porque me lo hayan contado, he tenido que estar en alguna fila y me ha tocado escuchar y ver a la gente con esta necesidad; pregunta por todos lados para ver si encuentra a una persona que le dé alguna solución, no encuentra a nadie. Finalmente, esas personas no sé cómo dieron salida a su necesidad.
Comprendo que el gran problema lo tienen las instituciones bancarias con la inseguridad que sufrimos por todos lados y a todos los niveles, entiendo ese problema. Seguramente poniéndose de acuerdo con las autoridades de los Estados y de los Municipios encontrarán la solución. Ignoro cómo habrán hecho en otros países, pero alguna forma habrán encontrado para hacer frente al problema de sus usuarios. Ofrezco a los amables lectores que para otra ocasión trataré de investigar y poder decir lo que han hecho en otras partes del mundo.
Aquí en México en algunas instituciones bancarias han querido tratar el problema con establecimientos cercanos que puedan dar esos servicios, la respuesta que han encontrado es que el servicio que tienen es para sus clientes, que no encuentran que harían con las personas de los bancos que fueran.
Muchas veces estos que parecen ser grandes problemas tienen solución comenzando a atender lo pequeño. Pienso que un banco puede poner al lado los servicios sanitarios que considere indispensable. He sabido de iglesias que nunca tuvieron este tipo de servicios, actualmente se han visto precisadas a ponerlos.
OPINIÓN POR JOSÉ DÁVALOS
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