De ser un magnífico instrumento de las democracias más avanzadas y el mejor ejemplo del poder ciudadano, esta revocación de mandato que promueve Morena, se convirtió en un abyecto besamanos presidencial.
Y es que a quien se le ocurrió, que después de dos años de la peor pandemia en la historia de la humanidad, sería buena idea implementar un ejercicio de participación ciudadana de más de mil 500 millones de pesos en época de crisis, y cuando nuestras prioridades son muuuuy distintas.
Por supuesto que instrumentos que ayuden a equilibrar el poder, como el plebiscito o referéndum, siempre serán bienvenidos, pero resulta un absurdo que se empecine el actual gobierno en ratificarse a sí mismo, cuando absolutamente nadie ha propuesto seriamente en este sexenio, la revocación de mandato del Presidente.
De risa loca cuando alguien de otro país llega, y al ver espectaculares en toda la ciudad te preguntan ¿por qué quieren tumbar a López Obrador?
Y lo más patético, el besamanos en lo que se ha convertido esta millonaria pantomima, porque ahora resulta que gobernadores, alcaldes, y precandidatos de Morena, compiten entre ellos para saber quién le llevara más votos y quien quedara mejor con AMLO.
Así, desde el manejo del presupuesto público, hasta los chantajes más bajos a empleados, vecinos, beneficiarios de programas sociales y comerciantes, para obligarlos a que vayan a votar.
Por ejemplo, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, la cuota que les están pidiendo a los comerciantes populares, ambulantes pues, es que lleven a votar a 10 más, y que entreguen la “documental” del voto con foto o video, porque si no lo hacen, van pa fuera.
Si tan solo hay 35,000 ambulantes en el perímetro A y B, échele cuentas de cuantos votos es el mapacheo que les encargaron a los operadores de Sheinbaum, En Alcaldías de Morena, la condicionante es para los vecinos, a quienes engañan señalándoles que si no votan, les quitarán los programas sociales o no serán ya atendidas sus gestiones, de ese nivel están.
Este próximo lunes al no obtener los millones de votos deseados, Morena culpará a todo mundo, menos a ellos mismos. Y ellos, se vanagloriarán de quien hizo más compra de voto, clientelismo y mapacheo, para cumplir su cuota y quedar bien con don Presidente. Así no AMLO.
Twitter: @floresaquino
