/ domingo 3 de noviembre de 2019

Repudiable criminalidad

Vaya escenario de violencia que están viviendo los municipios mexiquenses de la zona conurbada. Ninguna autoridad asume las riendas para frenar la ola criminal que azota a las localidades más pobladas de la región.

El gobierno del Estado de México, que muestra signos de no tener el mínimo interés de estrechar la coordinación con los ayuntamientos emanados de Morena, deja en el limbo la tranquilidad y bienestar de la población, mientras los alcaldes de la zona hacen alarde de una vergonzosa ineficiencia en el combate contra el lastre delictivo.

Lo sucedido este fin de semana en Ecatepec, por ejemplo, donde un grupo de pistoleros acabó con la vida de dos niños y la madre de éstos, representa lo más crudo y sanguinario de la violencia en ese municipio, donde se prometió un cambio en favor de los habitantes, cuyo empeño de palabra nomás no se ha hecho realidad.

Este suceso es el más reciente y el más atroz registrado en la colonia Luis Donaldo Colosio, convertida en tierra de nadie, como muchas otras comunidades de la localidad.

La incapacidad del gobierno local por detener la racha abominable se enmarca en la esperanza de que la llegada de la Guardia Nacional hará la chamba de su corporación policiaca, pues es inocultable el nivel de desinterés por implementar estrategias locales para encarar a los grupos que se han apoderado del territorio.

El mismo panorama se vive en otros zonas como Naucalpan, Coacalco, Tultitlán y Cuautitlán Izcalli, sólo por citar algunos municipios, que parecen franja desconocida del gobierno estatal.

A RENGLÓN SEGUIDO

QUEDÓ refrendado el dominio de Higinio Martínez Miranda en el Estado de México, al más puro estilo del político caciquil, padrino de prácticamente todos los alcaldes de los municipios más representativos del área metropolitana.

De hecho, el fallo del Tribunal Electoral de invalidar el proceso de elección de esa organización política le vino como anillo al dedo a la secta de Texcoco, ala que controla puestos y decisiones morenistas en territorio mexiquense… TIENE ahora la fiscalía que encabeza Alejandro Gómez Sánchez otro caso apremiante si es que desea mostrarse como una dependencia eficaz, tras la muerte del alcalde de Valle de Chalco, Francisco Tenorio, cuya esposa dijo tener la seguridad de que no se trató de un asunto político.

¿A dónde apuntará el atentado? Más allá de la especulación, el sentir de la mayoría termina siendo siempre sinónimo de la indiferencia de la autoridad.

rreportero@yahoo.com.mx

Vaya escenario de violencia que están viviendo los municipios mexiquenses de la zona conurbada. Ninguna autoridad asume las riendas para frenar la ola criminal que azota a las localidades más pobladas de la región.

El gobierno del Estado de México, que muestra signos de no tener el mínimo interés de estrechar la coordinación con los ayuntamientos emanados de Morena, deja en el limbo la tranquilidad y bienestar de la población, mientras los alcaldes de la zona hacen alarde de una vergonzosa ineficiencia en el combate contra el lastre delictivo.

Lo sucedido este fin de semana en Ecatepec, por ejemplo, donde un grupo de pistoleros acabó con la vida de dos niños y la madre de éstos, representa lo más crudo y sanguinario de la violencia en ese municipio, donde se prometió un cambio en favor de los habitantes, cuyo empeño de palabra nomás no se ha hecho realidad.

Este suceso es el más reciente y el más atroz registrado en la colonia Luis Donaldo Colosio, convertida en tierra de nadie, como muchas otras comunidades de la localidad.

La incapacidad del gobierno local por detener la racha abominable se enmarca en la esperanza de que la llegada de la Guardia Nacional hará la chamba de su corporación policiaca, pues es inocultable el nivel de desinterés por implementar estrategias locales para encarar a los grupos que se han apoderado del territorio.

El mismo panorama se vive en otros zonas como Naucalpan, Coacalco, Tultitlán y Cuautitlán Izcalli, sólo por citar algunos municipios, que parecen franja desconocida del gobierno estatal.

A RENGLÓN SEGUIDO

QUEDÓ refrendado el dominio de Higinio Martínez Miranda en el Estado de México, al más puro estilo del político caciquil, padrino de prácticamente todos los alcaldes de los municipios más representativos del área metropolitana.

De hecho, el fallo del Tribunal Electoral de invalidar el proceso de elección de esa organización política le vino como anillo al dedo a la secta de Texcoco, ala que controla puestos y decisiones morenistas en territorio mexiquense… TIENE ahora la fiscalía que encabeza Alejandro Gómez Sánchez otro caso apremiante si es que desea mostrarse como una dependencia eficaz, tras la muerte del alcalde de Valle de Chalco, Francisco Tenorio, cuya esposa dijo tener la seguridad de que no se trató de un asunto político.

¿A dónde apuntará el atentado? Más allá de la especulación, el sentir de la mayoría termina siendo siempre sinónimo de la indiferencia de la autoridad.

rreportero@yahoo.com.mx