Un nutrido grupo de militantes de Morena y del PRI, anunciaron su incorporación al Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Los nuevos integrantes del partido del sol azteca proceden del Estado de México y de las alcaldías de Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza y Azcapotzalco.
Quienes renunciaron a Morena apoyaron las candidaturas de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia y de Defina Gómez a la gubernatura del Estado de México.
Respecto a los ex priistas, éstos tuvieron una activa participación en la campaña a la gubernatura de Alfredo del Mazo.
El bloque, que se afilió este miércoles, pertenece al Organismo Popular General Social (OPGS).
Para los nuevos militantes, la izquierda no está en el gobierno sino en el partido amarillo.
Se mostraron cansados de que el nuevo gobierno se ha dedicado a dividir a los mexicanos.
“Morena sólo fue un espejismo –acusaron-, muchos votamos por López Obrador porque propuso expectativas muy altas para el cambio, pero fue lo opuesto”.
El evento de adhesión se celebró en la histórica sede del PRD, en Monterrey 50, Colonia Roma.
La ceremonia la encabezó el dirigente perredista, Jesús Ortega, quien le dio la bienvenida a quienes han depositado su confianza en el perredismo.
Se trata de uno de los tantos pasos que dará el PRD para su recomposición con miras a recuperar el poder en proceso electoral del 2021.
En los próximos días harán otros anuncios importantes como el de este miércoles.
Durante el pasado proceso de afiliación, el partido que gobernó la capital del país desde 1997, contabilizó un millón 500 mil militantes y estima que en diciembre alcance un padrón de 2 millones.
Está claro que este es el inicio de lo que puede ser una desbandada de Morena dadas las actuales condiciones en que se encuentra esa fuerza política.
Son reiterativos los desencuentros, las diferencias, los choques, reclamos y divisiones internas tanto el gobierno, como en su partido Morena y los Congresos estatales, tal y como sucede actualmente en el de la Ciudad de México.
PROSPECCIÓN… Que alguien le avise al ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, que lo van a meter en problemas en la 4T con los nuevos nombramientos en el Canal Judicial, en donde se han dado una serie de despidos injustificados. Resulta que se acaba de incorporar al Canal Judicial, como coordinador administrativo y con un sueldo de 132 mil pesos, Pedro Navarro Laflin, el ex oficial mayor de la PGR que es señalado por firmar contratos que obligan a la Fiscalía que dirige Alejandro Gertz Manero a rentar edificios con daños hasta el 2022. ¿Conocerá el ministro sus antecedentes o es parte de los ex funcionarios de la administración de Peña Nieto que ha rescatado?
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