/ martes 13 de abril de 2021

Que el pueblo…se chingue

El combate a la corrupción, impunidad y nepotismo fueron los pilares de las promesas de campaña del partido MORENA que hoy gobierna; luego del hartazgo social que los mexicanos veníamos manifestando por las malas administraciones que a la fecha nuestro querido México ha padecido, familiares y amigos cercanos al presidente Andrés Manuel López Obrador han sido evidenciados públicamente por ser parte de actos corruptos y tráfico de intereses con recursos públicos e influencias, quedando de manifiesto que solo un puñado de “empresarios” palomeados están felices y haciendo negocio como nunca, mientras que México y el pueblo se chinguen.

Recuerdo como una encuesta de INEGI del año 2018 reflejaba que más de la mitad de la población mayor de 18 años, consideró que la corrupción e impunidad existentes en México eran de los principales problemas que padecía nuestra nación, solo por debajo de la creciente inseguridad y delincuencia organizada. Pero consideraron y confiaron que, su voto, les brindaría la “esperanza” de que las cosas pronto cambiarían.

Lamentablemente a más de dos años de mandato, el ejecutivo federal no solo mintió en sus compromisos de campaña, sino que también, cerró todas las posibilidades para que mexicanos de bien, comprometidos con el país, pudieran participar en concursos públicos para trabajar con la administración pública federal, manipulando las licitaciones y asignando indebidamente, de manera directa, contratos de servicios, adquisiciones, obras, Etc., a familiares, compañeros de partido y amigos.

La alarmante y cruel realidad que hoy vivimos los mexicanos es que la corrupción, impunidad e inseguridad nos siguen lastimando severamente y costando a todos. El Banco Mundial estima que este fenómeno representa más de 9 por ciento del Producto Interno Bruto del país. Hoy, la 4T se está llenado de corrupción y, ante esta terrible realidad, desesperados buscan controlar los resultados de la elección que se aproxima e incluso tratan de destruir la imagen y desaparecer al INE, para acabar con una de las pocas instituciones que nos garantiza un real democracias. Así pues, la corrupción e impunidad en México crecen al amparo del presidencialismo y solo hermanos, hijos, primos, amigos cercanos y algunos integrantes del partido MORENA son los beneficiados…curiosamente este delito también los alcanza en el tema del nepotismo.


El combate a la corrupción, impunidad y nepotismo fueron los pilares de las promesas de campaña del partido MORENA que hoy gobierna; luego del hartazgo social que los mexicanos veníamos manifestando por las malas administraciones que a la fecha nuestro querido México ha padecido, familiares y amigos cercanos al presidente Andrés Manuel López Obrador han sido evidenciados públicamente por ser parte de actos corruptos y tráfico de intereses con recursos públicos e influencias, quedando de manifiesto que solo un puñado de “empresarios” palomeados están felices y haciendo negocio como nunca, mientras que México y el pueblo se chinguen.

Recuerdo como una encuesta de INEGI del año 2018 reflejaba que más de la mitad de la población mayor de 18 años, consideró que la corrupción e impunidad existentes en México eran de los principales problemas que padecía nuestra nación, solo por debajo de la creciente inseguridad y delincuencia organizada. Pero consideraron y confiaron que, su voto, les brindaría la “esperanza” de que las cosas pronto cambiarían.

Lamentablemente a más de dos años de mandato, el ejecutivo federal no solo mintió en sus compromisos de campaña, sino que también, cerró todas las posibilidades para que mexicanos de bien, comprometidos con el país, pudieran participar en concursos públicos para trabajar con la administración pública federal, manipulando las licitaciones y asignando indebidamente, de manera directa, contratos de servicios, adquisiciones, obras, Etc., a familiares, compañeros de partido y amigos.

La alarmante y cruel realidad que hoy vivimos los mexicanos es que la corrupción, impunidad e inseguridad nos siguen lastimando severamente y costando a todos. El Banco Mundial estima que este fenómeno representa más de 9 por ciento del Producto Interno Bruto del país. Hoy, la 4T se está llenado de corrupción y, ante esta terrible realidad, desesperados buscan controlar los resultados de la elección que se aproxima e incluso tratan de destruir la imagen y desaparecer al INE, para acabar con una de las pocas instituciones que nos garantiza un real democracias. Así pues, la corrupción e impunidad en México crecen al amparo del presidencialismo y solo hermanos, hijos, primos, amigos cercanos y algunos integrantes del partido MORENA son los beneficiados…curiosamente este delito también los alcanza en el tema del nepotismo.