/ domingo 21 de febrero de 2021

Piso parejo entre hombres y mujeres en elecciones 2021

Gabriela Jiménez Godoy

Humanista y activista social

En los últimos 20 años se han registrado numerosos avances legislativos, para garantizar la igualdad de género en los ámbitos público y privado, con el empoderamiento de las mujeres y la lucha contra la discriminación por razón de sexo.

Este año se llevará a cabo la elección para renovar la Cámara de Diputados federal, 30 congresos locales, 1,900 presidencias municipales y juntas municipales, así como 15 gubernaturas, para un total de 21,368 cargos de elección. Se estima en más de 96 millones los votantes potenciales, de los cuales 49 millones son mujeres y 47 millones hombres.

También se prevé la participación de alrededor de 10 mil mujeres como candidatas a puestos de elección, quienes esperan competir en igualdad de circunstancias con los hombres.

Lo anterior, siempre y cuando los partidos políticos emprendan acciones que prevengan y erradiquen conductas que limitan el ejercicio de sus derechos político-electorales, ya que en la mayoría de estas instituciones, se violenta y subestima la participación de la mujer en el ámbito público.

Para lograr piso parejo entre hombres y mujeres, se requiere que los partidos políticos permitan acceder a más mujeres en las dirigencias, para participar en la integración de candidaturas y asignación de recursos.

Es necesario que las candidaturas otorgadas a las mujeres, se asignen en lugares donde sí tengan posibilidades de ganar, y evitar que sean postuladas sólo para cumplir el requisito de paridad.

También deben cumplirse los lineamientos 3de3, donde se consideran los antecedentes de las personas postuladas a una candidatura, sin dejar de lado la claridad en los procedimientos para investigar y sancionar casos de violencia política de género.

Se requiere que los institutos políticos nacionales y locales establezcan en sus estatutos, los mecanismos que garanticen procesos internos de selección y postulación de candidaturas, así como eliminar la discrecionalidad en este rubro.

Es indispensable garantizar la no discriminación por género en la distribución de tiempos del Estado en radio y televisión, así como transparentar la distribución del financiamiento público para gastos de campaña.

Resultan imprescindibles la sensibilización y comunicación con las militancias, para erradicar las agresiones que impiden a las mujeres ejercer plenamente sus derechos políticos.

Lo arriba expuesto, refiere algunas medidas que deben establecerse, para mejorar las condiciones de participación política de las mujeres. Además de garantizar un piso parejo en la competencia electoral, donde la paridad -aunque no resuelve las desigualdades entre hombres y mujeres-, sí permite contar con una mejor representatividad al seleccionar equitativamente los cargos de elección.

Gabriela Jiménez Godoy

Humanista y activista social

En los últimos 20 años se han registrado numerosos avances legislativos, para garantizar la igualdad de género en los ámbitos público y privado, con el empoderamiento de las mujeres y la lucha contra la discriminación por razón de sexo.

Este año se llevará a cabo la elección para renovar la Cámara de Diputados federal, 30 congresos locales, 1,900 presidencias municipales y juntas municipales, así como 15 gubernaturas, para un total de 21,368 cargos de elección. Se estima en más de 96 millones los votantes potenciales, de los cuales 49 millones son mujeres y 47 millones hombres.

También se prevé la participación de alrededor de 10 mil mujeres como candidatas a puestos de elección, quienes esperan competir en igualdad de circunstancias con los hombres.

Lo anterior, siempre y cuando los partidos políticos emprendan acciones que prevengan y erradiquen conductas que limitan el ejercicio de sus derechos político-electorales, ya que en la mayoría de estas instituciones, se violenta y subestima la participación de la mujer en el ámbito público.

Para lograr piso parejo entre hombres y mujeres, se requiere que los partidos políticos permitan acceder a más mujeres en las dirigencias, para participar en la integración de candidaturas y asignación de recursos.

Es necesario que las candidaturas otorgadas a las mujeres, se asignen en lugares donde sí tengan posibilidades de ganar, y evitar que sean postuladas sólo para cumplir el requisito de paridad.

También deben cumplirse los lineamientos 3de3, donde se consideran los antecedentes de las personas postuladas a una candidatura, sin dejar de lado la claridad en los procedimientos para investigar y sancionar casos de violencia política de género.

Se requiere que los institutos políticos nacionales y locales establezcan en sus estatutos, los mecanismos que garanticen procesos internos de selección y postulación de candidaturas, así como eliminar la discrecionalidad en este rubro.

Es indispensable garantizar la no discriminación por género en la distribución de tiempos del Estado en radio y televisión, así como transparentar la distribución del financiamiento público para gastos de campaña.

Resultan imprescindibles la sensibilización y comunicación con las militancias, para erradicar las agresiones que impiden a las mujeres ejercer plenamente sus derechos políticos.

Lo arriba expuesto, refiere algunas medidas que deben establecerse, para mejorar las condiciones de participación política de las mujeres. Además de garantizar un piso parejo en la competencia electoral, donde la paridad -aunque no resuelve las desigualdades entre hombres y mujeres-, sí permite contar con una mejor representatividad al seleccionar equitativamente los cargos de elección.