/ martes 14 de septiembre de 2021

No a la autonomía del IPN

Estoy de acuerdo con la afirmación respecto a que el Instituto Politécnico Nacional, no debe dar marcha atrás, es correcto el IPN deberá cambiar y conservar la filosofía que le dio origen, su transformación no es opcional ni parcial, es una responsabilidad obligada con las nuevas generaciones y con el país. En especial, porque a la fecha no hay una agenda preestablecida en la realización del Congreso Nacional Politécnico (CNP), ni para la autonomía del Politécnico, ni mucho menos para algunos aspectos que se mencionan como la privatización del Instituto.

En lo que no estoy de acuerdo es que el “Honorable” Congreso de Hidalgo se prestara para buscar dar el albazo y querer madrugar a directivos, maestros, alumnos con una propuesta inviable, antidemocrática y, ya ni hablar de que no contempla la participación de la comunidad politécnica. Mi reconocimiento y felicitación al Dr. Arturo Reyes Sandoval, director general del IPN. por su invaluable apoyo para aprovechar la grande oportunidad de detonar un cambio estratégico, transversal y disruptivo que abarque la totalidad de las funciones y programas de la institución, al tiempo que revitaliza su identidad y valores. Es pues su compromiso un parteaguas en la historia de nuestra institución; la congruencia que nos hemos dado los politécnicos para que encontremos las mejores alternativas que nos conduzcan a la excelencia.

El CNP junto con la Agenda Estratégica de Transformación son la mejor ruta para que el Politécnico sea reconocido como una institución más pertinente que genera conocimiento para resolver los grandes problemas nacionales vinculados con México y el mundo, con las capacidades y fortalezas que le permiten avanzar en el apresurado y sin rumbo mundo de la °Cuarta Transformación° del país y la Cuarta Revolución Industrial, para contribuir de mejor manera al desarrollo nacional.

El cambio que todos los politécnicos queremos comienza con la construcción de espacios que propicien el consenso donde la comunidad externe sus puntos de vista y plantee sus propuestas”. Por ello, maestros, administrativos, personal de apoyo y alumnos externamos nuestro rechazo a la posible autonomía del Instituto Politécnico Nacional, mediante el Congreso Nacional Politécnico, que conducirá a reformar la Ley Orgánica de esa casa de estudios. Tal fin significaría la privatización de la educación.


Estoy de acuerdo con la afirmación respecto a que el Instituto Politécnico Nacional, no debe dar marcha atrás, es correcto el IPN deberá cambiar y conservar la filosofía que le dio origen, su transformación no es opcional ni parcial, es una responsabilidad obligada con las nuevas generaciones y con el país. En especial, porque a la fecha no hay una agenda preestablecida en la realización del Congreso Nacional Politécnico (CNP), ni para la autonomía del Politécnico, ni mucho menos para algunos aspectos que se mencionan como la privatización del Instituto.

En lo que no estoy de acuerdo es que el “Honorable” Congreso de Hidalgo se prestara para buscar dar el albazo y querer madrugar a directivos, maestros, alumnos con una propuesta inviable, antidemocrática y, ya ni hablar de que no contempla la participación de la comunidad politécnica. Mi reconocimiento y felicitación al Dr. Arturo Reyes Sandoval, director general del IPN. por su invaluable apoyo para aprovechar la grande oportunidad de detonar un cambio estratégico, transversal y disruptivo que abarque la totalidad de las funciones y programas de la institución, al tiempo que revitaliza su identidad y valores. Es pues su compromiso un parteaguas en la historia de nuestra institución; la congruencia que nos hemos dado los politécnicos para que encontremos las mejores alternativas que nos conduzcan a la excelencia.

El CNP junto con la Agenda Estratégica de Transformación son la mejor ruta para que el Politécnico sea reconocido como una institución más pertinente que genera conocimiento para resolver los grandes problemas nacionales vinculados con México y el mundo, con las capacidades y fortalezas que le permiten avanzar en el apresurado y sin rumbo mundo de la °Cuarta Transformación° del país y la Cuarta Revolución Industrial, para contribuir de mejor manera al desarrollo nacional.

El cambio que todos los politécnicos queremos comienza con la construcción de espacios que propicien el consenso donde la comunidad externe sus puntos de vista y plantee sus propuestas”. Por ello, maestros, administrativos, personal de apoyo y alumnos externamos nuestro rechazo a la posible autonomía del Instituto Politécnico Nacional, mediante el Congreso Nacional Politécnico, que conducirá a reformar la Ley Orgánica de esa casa de estudios. Tal fin significaría la privatización de la educación.