Hace algunos meses amigo lector denunciamos las anomalías que venían cometiendo elementos de tránsito del municipio de Cuautitlán Izcalli, quienes por cualquier cosa detenían automovilistas, a quienes llevaban a su “corralón” particular que improvisaron en la mismísima explanada del Palacio Municipal para extorsionarlos con fuertes cantidades de dinero, a cambio de liberar sus unidades.
Que por el hoy no circula, que por falta de licencia, tarjeta de circulación, una calavera fundida o a resumidas cuentas por cualquier cosa detienen a incautos automovilista, pues según se denunció, por instrucciones del Comisario Juan Daniel Ríos Garrido, los uniformados tienen la obligación de llevar a “su corralón”, al menos 4 vehículos por día, para llevarse ilícitamente diferentes cantidades de dinero que según se dijo ascienden a más de 100 mil pesos ¡por día!, que le parece.
En esta columna denunciamos estas anomalías y nadie dijo nada, al Presidente Municipal Ricardo Núñez no le importo y permitió que sus policías siguieran operando de esa forma, posiblemente porque también le llega “su mochada”. En la semana, el portero suplente del equipo de futbol Cruz Azul, Jair Peláez sufrió en carne propia junto con su familia de la voracidad de los policías de dicho municipio.
El arquero denunció que en días pasados circulaba en su auto por el periférico norte, a la altura del centro comercial Punta Norte, cuando los tripulantes de la patrulla 24747 lo detuvieron porque no circulaba. Consciente de su falta, dijo el portero, pregunto a los uniformados cuanto tenía que pagar por su falta y dónde. Sin embargo, para su sorpresa los policías lo llevaron a “su corralón” y ahí lo amedrantaron y amenazaron con hacerle daño a él y su familia si no les daba 10 mil pesos.
Ante tal situación, el portero para evitar problemas y que los uniformados le hicieran daño a su familia subió a la patrulla 24747, cuyos uniformados lo llevaron a dos cajeros automáticos de donde sacó el dinero que los municipales le exigían. Luego de que entregó el dinero, dijo el cancerbero, los policías lo dejaron ir, que le parece.
De verdad que con tantos problemas los ciudadanos ya no sabemos qué hacer, si cuidarnos del coronavirus o de los delincuentes que más que nunca hacen de las suyas o de la misma policía.
Ojalá que el gobierno municipal de Cuautitlán Izcalli ahora sí tome cartas en el asunto y les ponga un alto a estos policías o de plano los detenga y dé de baja de la corporación, pues no es posible estar cuidándose de ellos, no lo cree amigo lector. Nos leemos el domingo. alvarovem@hotmail.com
