Rubén Pérez
Más temprano que tarde a la administración de Naucalpan le aparecieron los destellos de las desavenencias, pues es cada vez más evidente el forcejeo político al interior del cuerpo edilicio, donde “institucionalmente” tienen que convivir regidores, síndicos y la alcaldesa de Morena, Patricia Durán Reveles. Resulta que los integrantes de la fracción del PAN pusieron el grito en el cielo, tras acusar a la presidenta municipal de no transparentar la compra de patrullas y vehículos oficiales para las diferentes áreas del gobierno. Los panistas aducen que no se conoce cómo se licitó el asunto, además de que advierten que tampoco se sabe el monto que se pagó por la adquisición de las unidades. A la síndico tercero del ayuntamiento, Sandra León Bravo, casi le salen ronchas de tanto rascarse, pensando cómo se habrá dado la operación. Aun cuando ella es integrante de la comisión de Patrimonio Municipal, nadie le informó detalles de la compra de la administración que encabeza la alcaldesa de Morena, el instituto político, cuyo adalid pregona siempre a los cuatro vientos ser el defensor de la transparencia. Dicen los regidores que nadie conoce montos de la compra de 135 patrullas y otros vehículos. Al ring también se subió el coordinador de los regidores panistas, Pedro Fontaine Martinez, quien coincidió en señalar que hay un vació de información en las compras que ha realizado el gobierno, pero la presidenta municipal prefirió quedarse en su esquina.
A RENGLON SEGUIDO
ABOMINABLE es el ambiente en que tienen que sobrevivir las familias de Ecatepec, donde los feminicidios nomás no paran y confirman la lamentable expresión de que “ser mujer en el Estado de México es un delito” y más en ese municipio, cuyas autoridades están sometidas por gavillas de malandros, al más puro estilo del sindicato del crimen, pues reciben todas las concesiones de la policía local que parece estar al servicio de los delincuentes… CON el distintivo de la “Ciudad del Futuro”, el municipio 121 del Estado de México: Cuautitlán Izcalli, es hoy por hoy una zona que a partir de 2000, en menos de 20 años, rompió su proyecto original y quedó devorado por la anarquía de desarrollos habitacionales, realidad que ningún gobierno frenó y que actualmente paga las consecuencias por la falta de servicios. Lo peor es que el gobierno en turno da señales de que repetirá la voracidad de proyectos que maniobran para torcer la ley a conveniencia... FIELES a su pastor, los seguidores mexiquenses de la llamada 4T, incrustados en el Congreso local, piden no normalizar hechos como los sucedidos en la masacre de Minatitlán, Veracruz. Además de intentar quedar bien con el patrón, no queda claro a qué se refieren con “no normalizar”.
rreportero@yahoo.com.mx
