/ miércoles 24 de junio de 2020

LORET EL MENSAJERO

México ocupa ya en el mundo el 2º deshonroso lugar en noticias falsas, y esta semana le tocó a la Secretaria de la Función Pública, la Dra. Irma Eréndira Sandoval, y a su esposo, el académico y periodista John Ackerman. Fue a través de Carlos Loret, que publicó en reciente medio digital, un “reportaje” dando a conocer la declaración patrimonial de la funcionaria.

Pecata minuta, esta declaración siempre ha sido abierta y transparente a toda la ciudadanía. La mala leche, trampa, o como le quiera usted llamar, consiste en este ejemplo que le voy a poner:

Mañana lo contratan para trabajar en el gobierno, y un requisito es su declaración patrimonial. Lo que declara es una casa –herencia del papá fallecido- valuada en su momento en un millón de pesos. Un departamento que se compró hace 10 años en millón y medio, y un terreno en Cuernavaca que compró hace 5 años en 1 millón igual. Esto acumulado durante años de trabajo siempre fuera de gobierno.

Así, el valor total de su patrimonio, equivalía al momento de su adquisición en 3 millones y medio de pesos, producto de su trabajo y una herencia, nada más.

La persona con quien está casado, tiene un departamento que compró en un millón, y, sus padres, que son muy solventes, decidieron regalarle una casa de 3 millones para que vivan muy bien con sus nietos. Así, su pareja tiene bienes por 4 millones de pesos, que sumados a los 3 millones y medio suyos, contabilizan 7 millones y medio de pesos de 5 propiedades. En eso consiste su declaración patrimonial.

No hay ilegalidad alguna.

Pero –siguiendo en este ejemplo- alguien a quien usted no le cae nada bien, dice a quién lo contrató, que lo que declaró lo obtuvo de manera ilícita, y que su compadre le dijo que sus 5 propiedades en realidad valen 30 millones de pesos. Y no sólo eso, sino que hace pública la dirección de su casa, por si algún secuestrador o extorsionador se le ofrece.

De ese tamaño fue el dolo y la fake news contra la familia Ackerman Sandoval, replicado principalmente, por Felipe Calderón. Por algo será.

@floresaquino

México ocupa ya en el mundo el 2º deshonroso lugar en noticias falsas, y esta semana le tocó a la Secretaria de la Función Pública, la Dra. Irma Eréndira Sandoval, y a su esposo, el académico y periodista John Ackerman. Fue a través de Carlos Loret, que publicó en reciente medio digital, un “reportaje” dando a conocer la declaración patrimonial de la funcionaria.

Pecata minuta, esta declaración siempre ha sido abierta y transparente a toda la ciudadanía. La mala leche, trampa, o como le quiera usted llamar, consiste en este ejemplo que le voy a poner:

Mañana lo contratan para trabajar en el gobierno, y un requisito es su declaración patrimonial. Lo que declara es una casa –herencia del papá fallecido- valuada en su momento en un millón de pesos. Un departamento que se compró hace 10 años en millón y medio, y un terreno en Cuernavaca que compró hace 5 años en 1 millón igual. Esto acumulado durante años de trabajo siempre fuera de gobierno.

Así, el valor total de su patrimonio, equivalía al momento de su adquisición en 3 millones y medio de pesos, producto de su trabajo y una herencia, nada más.

La persona con quien está casado, tiene un departamento que compró en un millón, y, sus padres, que son muy solventes, decidieron regalarle una casa de 3 millones para que vivan muy bien con sus nietos. Así, su pareja tiene bienes por 4 millones de pesos, que sumados a los 3 millones y medio suyos, contabilizan 7 millones y medio de pesos de 5 propiedades. En eso consiste su declaración patrimonial.

No hay ilegalidad alguna.

Pero –siguiendo en este ejemplo- alguien a quien usted no le cae nada bien, dice a quién lo contrató, que lo que declaró lo obtuvo de manera ilícita, y que su compadre le dijo que sus 5 propiedades en realidad valen 30 millones de pesos. Y no sólo eso, sino que hace pública la dirección de su casa, por si algún secuestrador o extorsionador se le ofrece.

De ese tamaño fue el dolo y la fake news contra la familia Ackerman Sandoval, replicado principalmente, por Felipe Calderón. Por algo será.

@floresaquino