/ martes 23 de julio de 2019

La nutrición, uno de los temas prioritarios

Uno de los temas que requiere de una atención constante y permanente en México y en el mundo es la nutrición y, aunque hay algunos avances importantes para contrarrestar sus efectos, todavía falta mucho por hacer.

Nuestro país desde hace tiempo ocupa los primeros lugares a nivel mundial con problemas de sobrepeso y obesidad.

De acuerdo con un informe de la UNICEF, uno de cada 20 niñas y niños menores de 5 años y uno de cada tres entre los 6 y 19 años padecen obesidad y sobrepeso, provocado por una mala alimentación.

Este organismo internacional reconoce que la desnutrición durante la infancia tiene impactos negativos en el desarrollo individual, mientras que el sobrepeso y la obesidad favorecen la aparición de enfermedades como la diabetes, del corazón o de los riñones.

Esta situación también va de la mano con la falta de seguridad alimentaria. Hace unos días, la ONU presentó su Informe de Nutrición Mundial, el cual destaca que en Latinoamérica y el Caribe hay 42.5 millones de personas afectadas por el hambre debido a la desaceleración económica y algunos conflictos en algunas zonas.

La mala nutrición afecta a todos los países del mundo, indica, la cual se identifica por un retraso en el crecimiento de los niños, anemia y sobrepeso en las mujeres adultas.

El informe revela que si bien se ha registrado un incremento del número y la amplitud de las políticas y las metas en materia de nutrición, su financiación y su puesta en práctica siguen suponiendo un reto. “Cada vez son más los países que colocan la nutrición entre sus prioridades a través del establecimiento de políticas y planes de acción en la materia: 164 países cuentan con planes de nutrición, el 61% de los cuales son multisectoriales”, subraya.

Sin embargo, algo está fallando. Desde mi perspectiva, independientemente de la situación política y económica que enfrenten los países, requieren comprometerse más para seguir disminuyendo la desnutrición y la falta de seguridad alimentaria. No es una tarea fácil.

El tema, vemos se ha convertido en un eje de trabajo prioritario para organismos internacionales y en todos los países del mundo, México está en la línea.

Uno de los temas que requiere de una atención constante y permanente en México y en el mundo es la nutrición y, aunque hay algunos avances importantes para contrarrestar sus efectos, todavía falta mucho por hacer.

Nuestro país desde hace tiempo ocupa los primeros lugares a nivel mundial con problemas de sobrepeso y obesidad.

De acuerdo con un informe de la UNICEF, uno de cada 20 niñas y niños menores de 5 años y uno de cada tres entre los 6 y 19 años padecen obesidad y sobrepeso, provocado por una mala alimentación.

Este organismo internacional reconoce que la desnutrición durante la infancia tiene impactos negativos en el desarrollo individual, mientras que el sobrepeso y la obesidad favorecen la aparición de enfermedades como la diabetes, del corazón o de los riñones.

Esta situación también va de la mano con la falta de seguridad alimentaria. Hace unos días, la ONU presentó su Informe de Nutrición Mundial, el cual destaca que en Latinoamérica y el Caribe hay 42.5 millones de personas afectadas por el hambre debido a la desaceleración económica y algunos conflictos en algunas zonas.

La mala nutrición afecta a todos los países del mundo, indica, la cual se identifica por un retraso en el crecimiento de los niños, anemia y sobrepeso en las mujeres adultas.

El informe revela que si bien se ha registrado un incremento del número y la amplitud de las políticas y las metas en materia de nutrición, su financiación y su puesta en práctica siguen suponiendo un reto. “Cada vez son más los países que colocan la nutrición entre sus prioridades a través del establecimiento de políticas y planes de acción en la materia: 164 países cuentan con planes de nutrición, el 61% de los cuales son multisectoriales”, subraya.

Sin embargo, algo está fallando. Desde mi perspectiva, independientemente de la situación política y económica que enfrenten los países, requieren comprometerse más para seguir disminuyendo la desnutrición y la falta de seguridad alimentaria. No es una tarea fácil.

El tema, vemos se ha convertido en un eje de trabajo prioritario para organismos internacionales y en todos los países del mundo, México está en la línea.