El Aullido de LoboLo ocurrido en un colegio de Torreón ha dejado un amargo sabor de boca para todos, es increíble que algo tan grave pase en nuestro país, cuando lo mirábamos tan lejano y ajeno, tal vez con la creencia de: aquí nunca ocurriría eso y menos aún que el personaje central fuera un menor de edad.
Luego han surgido las preguntas y especulaciones, desde las que se fundan en conocimientos profesionales hasta las más descabelladas, como las vertidas en redes sociales, donde pretenden hacer leña del árbol caído al decir: “se trató de un menor nacido en el sexenio de Felipe Calderón”, una verdadera aberración, producto de todo lo que se puede subir a redes sociales.
Sin embargo, es necesario ver el fondo y no la forma, ir al origen, conocer, si, ¿De dónde salieron las armas? ¿Quién le enseñó a tirar? ¿Actuó solo? Y sobre todo ¿Qué lo llevó a desatar ese infierno?.
Es cierto que ya nadie puede entrar en la cabeza de este niño, pero seguro se podrá armar un rompecabezas con lo que se pueda obtener de su teléfono celular, cuadernos, objetos personales, computadora y personas más cercanas.Es necesario un estudio científico, que nos diga ¿Qué conflicto tan grande había en la cabeza de esta víctima? porque eso es lo que es este pequeño, no es el criminal que algunos tratan de ver, era un menor, un niño con la falta de una madre, lejos de su padre y ¿quién sabe qué cosas más en su existencia?
Creo que lo más cercano al sentir de la comunidad en este Colegio, es la carta escrita por un padre de familia, de la cual comparto solo algunos párrafos:
"En tu comunidad, en tu estado y en tu país nos quedamos muy consternados por tu decisión que sacudió de golpe nuestra estúpida realidad.
Muchos juzgan la memoria de tu pequeña persona haciéndote ver cómo un abominable asesino. Pero otros te creemos víctima y nos sentimos culpables de no haber hecho lo correcto contigo.
Culpables por no entenderte y ser parte de una sociedad violenta, corrupta y disimulada. Supe por las noticias que perdiste a tu mamá hace meses, sin duda la encontrarás en el cielo, que quedaste a cargo de tu abuelita y que tu papá poco te visitaba.
Supe también que pasabas por un mal momento en la escuela y que eras un niño muy aplicado. Nadie te escuchó, nadie puso atención, nadie te tendió la mano, te fallaron los tuyos y te fallamos nosotros.
Te faltaron amigos y hoy te sobran juzgadores. Los políticos y funcionarios culpan a los videojuegos, a la música o al Youtube. Siempre que pasa algo nadie se hace responsable y todos culpan a todos, eso sucede pequeño cuando la cobardía nos gana…"
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