En plena discusión del presupuesto para el 2021, el tema del Ingreso Básico Universal cada vez suma más voces; organizaciones sociales, partidos políticos y ciudadanos se han pronunciado a favor de este apoyo.
En este momento, tanto la Cámara de Diputados como en el Senado de la República hay una intensa discusión sobre el tema, donde algunos están en contra y otros esgrimen diversos argumentos por impulsar esta medida ante la crisis económica que enfrenta el país.
Seguramente seremos testigos de largos discursos, donde diputados y senadores hablarán a favor o en contra, y mientras el debate se dirime en las altas esferas políticas, hay millas de personas que requieren este apoyo para sobrevivir.
La situación económica no es fácil. En los últimos siete meses, 5.9 millones de personas perdieron su empleo o fuente de ingresos. Tan solo en abril, la pérdida fue de 12 millones de fuentes de trabajo.
Datos del INEGI señalan que los principales motores de la economía mexicana como es la inversión física, el consumo y las exportaciones registraron durante el segundo trimestre de 2020 la caída más fuerte de la que se tiene registro, producto de la crisis generada por la pandemia.
El Ingreso Básico Universal es una propuesta que desde hace meses ha sido abanderada por un frente de ciudadanos, organizaciones y algunos partidos políticos. Hace unos días, senadores del PAN, PRI, PRD y Movimiento Ciudadano presentaron una solicitud de consulta popular sobre el Ingreso Básico Universal. Sin embargo, hasta ahora la respuesta ha sido el silencio.
Nuestro país enfrenta la peor crisis económica, se han perdido miles de empleos y han cerrado cientos de negocios y pequeñas empresas. Ya tenemos 700 mil personas contagiadas de Covid-19 y alcanzamos más de 75 mil defunciones. Y mientras superamos la pandemia que seguramente se prolongará un año más hasta que haya una vacuna, miles de familias estarán en una situación económica complicada.
Desde hace meses me he sumado a esta propuesta, a que en nuestro país, exista el Ingreso Básico Universal. Hay datos que deben alertar a los legisladores, quienes tendrán la última palabra en la aprobación del presupuesto para el próximo año. Es urgente que sean realistas y entiendan que las familias mexicanas enfrentan una complicada situación económica.
El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), señala que los empleados informales son los más sensibles ante la emergencia sanitaria y la desaceleración económica, ya que no cuentan con seguridad social y sus ingresos son menores que los de empleos formales .
Ya no busquemos pretextos, los programas sociales son insuficientes para enfrentar esta crisis económica. Hay que apoyar a quienes más lo necesitan.
--00--
