/ domingo 13 de marzo de 2022

Impacta economía conflicto Rusia-Ucrania  

El conflicto con Ucrania le ha generado un mar de sanciones económicas a Rusia, tales como su exclusión de las operaciones financieras en el sistema de pagos SWIFT, el cierre del espacio aéreo de la Unión Europea y las penalizaciones internacionales, afectando su moneda que perdió más del 20%. Se suma, la inmensa fuga de capitales debido a la alta volatilidad que perciben los inversionistas en ese país.

La paralización de inversiones y la desbandada de empresas multinacionales, desde petroleras hasta fabricantes de vehículos, que perciben un enorme riesgo financiero en Rusia, podrían detener el crecimiento de ese país en el mediano plazo.

Sin embargo, esas reacciones financieras podrían afectar a economías como la mexicana, al existir gran presión en el alza sobre los precios internacionales del gas natural y la gasolina, que ya se encuentran a niveles internacionales no vistos en muchos años. Esta situación genera que los precios del Gas LP mexicano se eleven demasiado a pesar de estar fuertemente regulados por el estado; en tanto que el valor de las gasolinas puede incrementarse por encima del esquema de estabilización de precios de los combustibles.

Los aumentos internacionales son extremadamente sensibles ante cualquier inestabilidad en los territorios productores de combustibles o sus derivados y generan impactos inmediatos en nuestro país, el cual importa el 49% de gasolina y diésel que consume, por lo que las afectaciones inmediatas se perciben en precios de los combustibles y varios productos de consumo nacional.

Bajo este escenario, el gobierno mexicano está evitando que las variaciones en el precio del petróleo afecten el poder adquisitivo y principalmente al consumo de los mexicanos. Para ello aplica mayores subsidios al costo total de la gasolina para contener su incremento y reducir el impacto en todas las cadenas de valor.

Es de observar que México depende de la producción de granos a nivel internacional por lo que el conflicto podría aumentar los precios internacionales del maíz, trigo y sorgo, materias primas que son sensibles para la canasta alimentaria de los mexicanos. Hay que poner atención en las reservas que se tengan para el resto del año, debiendo buscarse proveedores diversos para evitar invertir grandes cantidades en la compra de los insumos necesarios para cubrir las necesidades del país.

Se registran condiciones de inestabilidad en los mercados financieros con un acelerado incremento en la demanda de dólares, lo que afecta
el valor del peso mexicano al incrementarse el tipo de cambio. Por ello es importante ser mesurados con el gasto familiar e individual, al no conocerse cuando terminará el conflicto y las secuelas que seguirá provocando esta situación en nuestra moneda, en los sectores productivos y en el valor de los productos que consumimos.

Twitter: @EFGANCIRA

El conflicto con Ucrania le ha generado un mar de sanciones económicas a Rusia, tales como su exclusión de las operaciones financieras en el sistema de pagos SWIFT, el cierre del espacio aéreo de la Unión Europea y las penalizaciones internacionales, afectando su moneda que perdió más del 20%. Se suma, la inmensa fuga de capitales debido a la alta volatilidad que perciben los inversionistas en ese país.

La paralización de inversiones y la desbandada de empresas multinacionales, desde petroleras hasta fabricantes de vehículos, que perciben un enorme riesgo financiero en Rusia, podrían detener el crecimiento de ese país en el mediano plazo.

Sin embargo, esas reacciones financieras podrían afectar a economías como la mexicana, al existir gran presión en el alza sobre los precios internacionales del gas natural y la gasolina, que ya se encuentran a niveles internacionales no vistos en muchos años. Esta situación genera que los precios del Gas LP mexicano se eleven demasiado a pesar de estar fuertemente regulados por el estado; en tanto que el valor de las gasolinas puede incrementarse por encima del esquema de estabilización de precios de los combustibles.

Los aumentos internacionales son extremadamente sensibles ante cualquier inestabilidad en los territorios productores de combustibles o sus derivados y generan impactos inmediatos en nuestro país, el cual importa el 49% de gasolina y diésel que consume, por lo que las afectaciones inmediatas se perciben en precios de los combustibles y varios productos de consumo nacional.

Bajo este escenario, el gobierno mexicano está evitando que las variaciones en el precio del petróleo afecten el poder adquisitivo y principalmente al consumo de los mexicanos. Para ello aplica mayores subsidios al costo total de la gasolina para contener su incremento y reducir el impacto en todas las cadenas de valor.

Es de observar que México depende de la producción de granos a nivel internacional por lo que el conflicto podría aumentar los precios internacionales del maíz, trigo y sorgo, materias primas que son sensibles para la canasta alimentaria de los mexicanos. Hay que poner atención en las reservas que se tengan para el resto del año, debiendo buscarse proveedores diversos para evitar invertir grandes cantidades en la compra de los insumos necesarios para cubrir las necesidades del país.

Se registran condiciones de inestabilidad en los mercados financieros con un acelerado incremento en la demanda de dólares, lo que afecta
el valor del peso mexicano al incrementarse el tipo de cambio. Por ello es importante ser mesurados con el gasto familiar e individual, al no conocerse cuando terminará el conflicto y las secuelas que seguirá provocando esta situación en nuestra moneda, en los sectores productivos y en el valor de los productos que consumimos.

Twitter: @EFGANCIRA