/ martes 8 de septiembre de 2020

Fábrica de pobres

La política económica implementada en nuestro país por el presidente Andrés Manuel López Obrador solo ha contribuido a un mayor aumento en la pobreza, es decir, el número de pobres se ha incrementado dramáticamente, a pesar de que el “Gobierno de la Cuarta Transformación” toda su vida política nos vendió, como argumento, que su principal compromiso con los mexicanos seria: “primero los pobres”.

Lamentablemente el escenario económico actual en México resulta en 13 millones de personas sin ocupación y de acuerdo al Coneval, en el contexto recesivo, alrededor de 2.2 millones de personas (casi toda la población de Yucatán) se sumaron a una situación de pobreza laboral para llegar a 69.5 millones de ciudadanos; es decir, 55 de cada de 100 habitantes en el país. La contracción de la economía en 2019, la crisis sanitaria y su mal manejo; provocada por Covid-19, incitó la mayor caída en la historia mexicana con un desplome de 18.9 por ciento. Incluso lo ocurrido en el segundo trimestre de este año superó las expectativas del consenso realizado por el Banco de México (Banxico) con 35 economistas nacionales y extranjeros, que esperaban una caída del 17.9 por ciento.

La realidad es que México se ha convertido lastimosamente en una fábrica de pobres, con más de 30 millones 349 mil 177 trabajadores que no pueden comprar la totalidad de los 40 alimentos básicos que la integran, al tener un ingreso que no rebasa los dos salarios mínimos diarios, insuficiente para erogar 349.96 pesos, costo por día de la CAR, establece el reporte de investigación México: fábrica de pobres.

Desafortunadamente para los mexicanos el gobierno de López Obrador ideo una estrategia económica a base de subsidios focalizados –transferencias económicas a familias, indigentes y población vulnerable- para combatir la desigualdad, la marginación y las bajas expectativas de madres solteras, menores en abandono y familias sin acceso a los servicios medios indispensables. En muchos casos el paliativo y sus efectos perversos en los fenómenos sociales, solo buscan militancia política clientelar. Pero una vez que las familias obtienen el "beneficio de esas oportunidades", la lucha verdadera es política, para mantenerlos en un estatus de pobres, de desvalidos, en lugar de generar fuentes de ingreso y enséñales a ganarse el sustento de cada día.

Así, en tan solo veinticuatro meses de administración de los “políticos” morenistas, un poco más de la mitad de los mexicanos viven en la pobreza y pobreza extrema. Además del cierre de empresas y negocios, el desempleo y la reducción nominal de millones de empleados, lo que merma aún más su nivel de vida por la pérdida del poder adquisitivo, sume usted amigo lector, el objetivo perverso de fabricar más pobres por intereses políticos .

La política económica implementada en nuestro país por el presidente Andrés Manuel López Obrador solo ha contribuido a un mayor aumento en la pobreza, es decir, el número de pobres se ha incrementado dramáticamente, a pesar de que el “Gobierno de la Cuarta Transformación” toda su vida política nos vendió, como argumento, que su principal compromiso con los mexicanos seria: “primero los pobres”.

Lamentablemente el escenario económico actual en México resulta en 13 millones de personas sin ocupación y de acuerdo al Coneval, en el contexto recesivo, alrededor de 2.2 millones de personas (casi toda la población de Yucatán) se sumaron a una situación de pobreza laboral para llegar a 69.5 millones de ciudadanos; es decir, 55 de cada de 100 habitantes en el país. La contracción de la economía en 2019, la crisis sanitaria y su mal manejo; provocada por Covid-19, incitó la mayor caída en la historia mexicana con un desplome de 18.9 por ciento. Incluso lo ocurrido en el segundo trimestre de este año superó las expectativas del consenso realizado por el Banco de México (Banxico) con 35 economistas nacionales y extranjeros, que esperaban una caída del 17.9 por ciento.

La realidad es que México se ha convertido lastimosamente en una fábrica de pobres, con más de 30 millones 349 mil 177 trabajadores que no pueden comprar la totalidad de los 40 alimentos básicos que la integran, al tener un ingreso que no rebasa los dos salarios mínimos diarios, insuficiente para erogar 349.96 pesos, costo por día de la CAR, establece el reporte de investigación México: fábrica de pobres.

Desafortunadamente para los mexicanos el gobierno de López Obrador ideo una estrategia económica a base de subsidios focalizados –transferencias económicas a familias, indigentes y población vulnerable- para combatir la desigualdad, la marginación y las bajas expectativas de madres solteras, menores en abandono y familias sin acceso a los servicios medios indispensables. En muchos casos el paliativo y sus efectos perversos en los fenómenos sociales, solo buscan militancia política clientelar. Pero una vez que las familias obtienen el "beneficio de esas oportunidades", la lucha verdadera es política, para mantenerlos en un estatus de pobres, de desvalidos, en lugar de generar fuentes de ingreso y enséñales a ganarse el sustento de cada día.

Así, en tan solo veinticuatro meses de administración de los “políticos” morenistas, un poco más de la mitad de los mexicanos viven en la pobreza y pobreza extrema. Además del cierre de empresas y negocios, el desempleo y la reducción nominal de millones de empleados, lo que merma aún más su nivel de vida por la pérdida del poder adquisitivo, sume usted amigo lector, el objetivo perverso de fabricar más pobres por intereses políticos .