Hay algo que a todos nos mantiene preocupados de manera permanente: la posibilidad de contagiarse por Covid-19. Y esta situación no es para menos, pues ya llevamos varios meses escuchando historias de conocidos, parientes y amigos enfermos o que lamentablemente perdieron la vida.
Pero hay una parte de la población mexicana que todavía no cree que pueda contagiarse. Otros dicen que no existe. Que es un invento.
Y la verdad, por desgracia, no es un invento. El reporte del domingo pasado fue estremecedor: 21 mil 825 defunciones y 180 mil 545 casos confirmados. Este día fue considerado como el de mayor registro de defunciones desde que inició la pandemia.
Las autoridades sanitarias lo han repetido más de una vez. Esta pandemia será larga y se espera un segundo brote en octubre próximo acompañado por la influenza.
Investigadores de todo el mundo buscan una vacuna para hacer frente a este virus. Todavía falta tiempo, no dudo que exista una cura. Por mientras, la pandemia avanza, destruye, enferma, mata.
Lo que nos queda es ser responsables de nosotros mismos. No podemos hacer que no pasa nada, cuando en el mundo ya hay 9 millones de personas contagiadas por Covid-19 y 469 mil 122 decesos.
Eric Feigl-Ding, epidemiólogo y economista de la salud en Harvard Chan School of Public Health, declaró hace poco que el índice de positividad de Covid-19 en México es mayor que los de Nueva York, Madrid y Lombardía en sus peores momentos de la pandemia.
Sea cierto o no, hay varios especialistas a nivel mundial que han volteado la mirada a nuestro país para alertar del riesgo de la pandemia. Incluso, hay cálculos que podría llegar a 30 mil número de decesos.
Por esta razón, es muy importante que todas y todos extremen las medidas de higiene y cuidado. No olvidemos que si alguien enferma, también contagia a sus seres queridos y amigos. Hoy más que nunca hay que ser responsables de nosotros mismos, no bajar la guardia, utilizar cubre bocas, lavarnos varias veces las manos, tomar nuestra distancia y salir lo menos posible de casa.
De verdad, quienes han padecido esta enfermedad hablan que sufres dolores muy intensos, que te falta la respiración y tus órganos van fallando. ¿Por qué llegar a ese extremo, inclusive hasta la muerte, solo por no querer cuidarse? Es absurdo, hoy tenemos que cuidarnos todas y todos, si en realidad queremos seguir viviendo. Por favor, cuídate y cuida a quienes amas.
