¿Qué tienen en común los convocantes y cabezas visibles en esto que se presentó como “Futuro 21”? Así es, son políticos derrotados en el proceso electoral del año pasado y que durante las últimas dos décadas han sido candidatos -elección tras elección- sin que el voto popular les haya favorecido.
Y si alguno de ellos ha llegado a Diputaciones o Senadurías, ha sido a través en su gran mayoría a través de plurinominales; quemón aparte el del Dr. José Narro, que, de haber sido un personaje sumamente respetado como Rector de la UNAM, integrante del gabinete de Enrique Peña Nieto, salió muy desprestigiado como perdedor del proceso interno de su expartido, el PRI. Lo peor, parece que vivía en otro país, pues en su discurso lo que describió es justamente por lo que la inmensa mayoría de mexicanos, votaron por un cambio apenas el año pasado.
Pena ajena quienes, de PANAL, elbistas, ahora intentan lavarse la cara queriéndose disfrazar como gran oposición, cuando en realidad lo que quieren es el hueso en las candidaturas del 2021. De lo que queda del extinto PRD, no vale la pena ni siquiera gastar tinta.
Por supuesto y claro que hacen falta contrapesos en la política. Muy necesaria una oposición inteligente, propositiva, qué de confianza en los mexicanos, y que contribuya a contar con un mejor país y que ayude a contribuir o mejorar políticas públicas del gobierno en funciones.
Pero con todo respeto, porque conozco a varios de los convocantes y en algunos de ellos sé que es legítimo su planteamiento y preocupación, no puede ser que en una agrupación que se autonombra “futuro” lo que veamos sean puros personajes del pasado y no veamos caras nuevas. Y menos, que en “2021” aludan claramente una ambición desmedida de los mismos de siempre por el hueso de las plurinominales.
Quizás por ello el deslinde -principalmente de académicos- de esta incipiente agrupación. Como diría el clásico para estos futuros pluris 2021 “vivir fuera del presupuesto es vivir en el error” ¡suerte!
Twitter: @floresaquino
