/ jueves 13 de mayo de 2021

El Gran Fraude

El gran fraude al pueblo de México ya lo orquestó Morena y el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Ambos, partido y gobierno no le han cumplido a los 30 millones de mexicanos que votaron por ellos.

Más aún, tampoco le han llevado beneficios a los 90 millones de mexicanos restantes que votaron por otras fuerzas políticas.

¿En qué se fundamenta lo anterior? En la cada vez más elevada desaprobación del gobierno de López Obrador y de su partido.

Por ejemplo, la aprobación de las conferencias mañaneras pasó en abril del 49 al 37%, el nivel más bajo en lo que va del sexenio.

En febrero de 2019, López Obrador gozó el momento cumbre de su popularidad con el 81%. Según Polls.mx, ha bajado a 55.90%, con tendencia a continuar su declive, según lo registrado en los últimos seis meses.

Y según las encuestas que coordina Alejandro Moreno, el 60% considera que el Presidente usa su conferencia mañanera para hacer proselitismo o atacar a sus adversarios.

Algo mucho más grave es que el 47% considera que el mandatario no habla con la verdad.

Hasta hace un año, el pronóstico indicaba que Morena obtendría la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados.

Hoy el panorama se le torna sombrío para el partido en el poder, pues estaría en riesgo de perder 140 distritos electorales, el doble de 2018. Se encuentra a un paso de perder también la mayoría simple.

Pero además, Morena violó la Constitución al registrar una sobrerrepresentación de más del doble de lo permitido, es decir del 21%.

En los estados, hace un año Morena festejaba que se llevaría “carro completo”, es decir, que triunfaba en las 15 gubernaturas del país. Hoy los sondeos le dan un triunfo en cuando mucho 5 entidades.

En la Ciudad de México, la última encuesta de Massive Caller le da el triunfo en nueve alcaldías a la oposición (en alianza y en candidaturas comunes), contra siete de Morena.

A lo anterior se le suma que la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum redujo su popularidad al pasar del 79 al 49%.

La tragedia de la Línea 12 del Metro que dejó 26 muertos y 80 heridos, provocó una disminución de 22 puntos en el nivel de aprobación de Sheinbaum.

Los datos anteriores, son resultado del fracaso de las políticas emprendidas por la “Cuarta Transformación”, tanto en salud, economía y seguridad pública.

A ello se le suma la obsesión del Presidente por convertirse de facto en el operador de la campaña de su partido, desde la sede del Poder Ejecutivo.

Es notable la desesperación, odio y sed de venganza del Presidente. Ha demostrado que no es un demócrata; nunca ha aceptado una derrota y cuando pierde arrebata.

Su apuesta es sembrar entre las conciencias, la idea de que en este 2021 habrá fraude en las elecciones.

Pero en realidad es él y su partido, los que han defraudado a México. Han hecho todo lo opuesto a lo que prometieron.

PROSPECCIÓN… “De ninguna vamos a aceptar que se nos responsabilice de alguna situación en donde no haya sido claramente responsables. Nosotros operamos el Metro desde julio de 2015 hasta febrero de 2018, ese es el tramo de responsabilidad que yo asumo completamente, ni hacia atrás, ni hacia adelante”, declaró el diputado Jorge Gaviño, quien en rueda de prensa en el Congreso de la Ciudad de México, retó a debatir sobre la línea dorada al canciller, Marcelo Ebrard, quien el 30 de octubre de 2012 inauguró la Línea 12 del Metro y construida bajo su administración como jefe de gobierno.

Twitter: @JoelSaucedo

saucedosj@yahoo.com.mx

El gran fraude al pueblo de México ya lo orquestó Morena y el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Ambos, partido y gobierno no le han cumplido a los 30 millones de mexicanos que votaron por ellos.

Más aún, tampoco le han llevado beneficios a los 90 millones de mexicanos restantes que votaron por otras fuerzas políticas.

¿En qué se fundamenta lo anterior? En la cada vez más elevada desaprobación del gobierno de López Obrador y de su partido.

Por ejemplo, la aprobación de las conferencias mañaneras pasó en abril del 49 al 37%, el nivel más bajo en lo que va del sexenio.

En febrero de 2019, López Obrador gozó el momento cumbre de su popularidad con el 81%. Según Polls.mx, ha bajado a 55.90%, con tendencia a continuar su declive, según lo registrado en los últimos seis meses.

Y según las encuestas que coordina Alejandro Moreno, el 60% considera que el Presidente usa su conferencia mañanera para hacer proselitismo o atacar a sus adversarios.

Algo mucho más grave es que el 47% considera que el mandatario no habla con la verdad.

Hasta hace un año, el pronóstico indicaba que Morena obtendría la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados.

Hoy el panorama se le torna sombrío para el partido en el poder, pues estaría en riesgo de perder 140 distritos electorales, el doble de 2018. Se encuentra a un paso de perder también la mayoría simple.

Pero además, Morena violó la Constitución al registrar una sobrerrepresentación de más del doble de lo permitido, es decir del 21%.

En los estados, hace un año Morena festejaba que se llevaría “carro completo”, es decir, que triunfaba en las 15 gubernaturas del país. Hoy los sondeos le dan un triunfo en cuando mucho 5 entidades.

En la Ciudad de México, la última encuesta de Massive Caller le da el triunfo en nueve alcaldías a la oposición (en alianza y en candidaturas comunes), contra siete de Morena.

A lo anterior se le suma que la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum redujo su popularidad al pasar del 79 al 49%.

La tragedia de la Línea 12 del Metro que dejó 26 muertos y 80 heridos, provocó una disminución de 22 puntos en el nivel de aprobación de Sheinbaum.

Los datos anteriores, son resultado del fracaso de las políticas emprendidas por la “Cuarta Transformación”, tanto en salud, economía y seguridad pública.

A ello se le suma la obsesión del Presidente por convertirse de facto en el operador de la campaña de su partido, desde la sede del Poder Ejecutivo.

Es notable la desesperación, odio y sed de venganza del Presidente. Ha demostrado que no es un demócrata; nunca ha aceptado una derrota y cuando pierde arrebata.

Su apuesta es sembrar entre las conciencias, la idea de que en este 2021 habrá fraude en las elecciones.

Pero en realidad es él y su partido, los que han defraudado a México. Han hecho todo lo opuesto a lo que prometieron.

PROSPECCIÓN… “De ninguna vamos a aceptar que se nos responsabilice de alguna situación en donde no haya sido claramente responsables. Nosotros operamos el Metro desde julio de 2015 hasta febrero de 2018, ese es el tramo de responsabilidad que yo asumo completamente, ni hacia atrás, ni hacia adelante”, declaró el diputado Jorge Gaviño, quien en rueda de prensa en el Congreso de la Ciudad de México, retó a debatir sobre la línea dorada al canciller, Marcelo Ebrard, quien el 30 de octubre de 2012 inauguró la Línea 12 del Metro y construida bajo su administración como jefe de gobierno.

Twitter: @JoelSaucedo

saucedosj@yahoo.com.mx