/ domingo 29 de mayo de 2022

Democracia, participación ciudadana y elecciones

Después del triunfo arrasador del cambio verdadero en 2018, en donde no solo se ganó la Presidencia de la República, sino que se arrebató la Ciudad de México al partido del sol y Chiapas, Veracruz, Morelos y Puebla también se pintaron de guinda, la Cuarta Transformación ha ido avanzando y consolidándose como el único proyecto de nación que trabaja verdaderamente por mejorar las condiciones sociales en nuestro país.

Según datos del Instituto Nacional Electoral (INE) la diferencia que obtuvo Andrés Manuel López Obrador respecto a los otros competidores fue la más alta en 30 años y si bien no se rompió el récord de participación -que le pertenece al proceso electoral de 1994 en dónde el abstencionismo se redujo al 22.84%-, los números fueron los más altos en 24 años considerando el crecimiento del listado nominal.

En 2021, se llevaron a cabo las elecciones más grandes en la historia de México, en donde el Movimiento Regeneración Nacional (MORENA) y partidos aliados ganaron el 62% de los distritos en disputa, es decir, 186 de 300. Además, se ganó la batalla por las gubernaturas en 11 entidades: Baja California, Baja California Sur, Campeche, Colima, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas.

El porcentaje de participación fue del 52% aproximadamente, la cifra más alta en 20 años para unas elecciones intermedias. Históricamente, la participación en los comicios para votar diputaciones federales (cada tres años) es menor cuando estos no coinciden con la elección presidencial, que se elige cada seis, sin embargo, fue considerablemente alta. Esto nos indica que existe un creciente interés por parte de la ciudadanía para hacer valer su voz en las urnas.

Lo anterior se expresa también con el gran resultado que se obtuvo el pasado 10 de abril en la Consulta por la Revocación de Mandato. Para ser un ejercicio sin precedentes y con apenas un tercio de las casillas que, en una jornada electoral ordinaria, haber obtenido 17.7% de participación a nivel nacional y muchos más votos incluso que expresidentes panistas, fue un triunfo para la democracia mexicana.

Los datos dibujan un panorama esperanzador para las elecciones que se avecinan este 5 de junio en Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, en donde hay altas probabilidades de que el partido del presidente de México triunfe y destierre por fin a la mafia del poder que por años ha gobernado esas entidades.

Estas entidades han sido bastiones importantes del PRIAN por años, pero hoy tienen la oportunidad de sumarse a la transformación, de decir adiós a los años de corrupción y atropellos. Se espera alta participación y el triunfo rotundo de la izquierda obradorista, los resultados demostrarán que MORENA sigue siendo la principal fuerza política rumbo al 2024.

Presidenta de Que Siga la Democracia AC

Twitter: @GabyJimenezMX

Después del triunfo arrasador del cambio verdadero en 2018, en donde no solo se ganó la Presidencia de la República, sino que se arrebató la Ciudad de México al partido del sol y Chiapas, Veracruz, Morelos y Puebla también se pintaron de guinda, la Cuarta Transformación ha ido avanzando y consolidándose como el único proyecto de nación que trabaja verdaderamente por mejorar las condiciones sociales en nuestro país.

Según datos del Instituto Nacional Electoral (INE) la diferencia que obtuvo Andrés Manuel López Obrador respecto a los otros competidores fue la más alta en 30 años y si bien no se rompió el récord de participación -que le pertenece al proceso electoral de 1994 en dónde el abstencionismo se redujo al 22.84%-, los números fueron los más altos en 24 años considerando el crecimiento del listado nominal.

En 2021, se llevaron a cabo las elecciones más grandes en la historia de México, en donde el Movimiento Regeneración Nacional (MORENA) y partidos aliados ganaron el 62% de los distritos en disputa, es decir, 186 de 300. Además, se ganó la batalla por las gubernaturas en 11 entidades: Baja California, Baja California Sur, Campeche, Colima, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas.

El porcentaje de participación fue del 52% aproximadamente, la cifra más alta en 20 años para unas elecciones intermedias. Históricamente, la participación en los comicios para votar diputaciones federales (cada tres años) es menor cuando estos no coinciden con la elección presidencial, que se elige cada seis, sin embargo, fue considerablemente alta. Esto nos indica que existe un creciente interés por parte de la ciudadanía para hacer valer su voz en las urnas.

Lo anterior se expresa también con el gran resultado que se obtuvo el pasado 10 de abril en la Consulta por la Revocación de Mandato. Para ser un ejercicio sin precedentes y con apenas un tercio de las casillas que, en una jornada electoral ordinaria, haber obtenido 17.7% de participación a nivel nacional y muchos más votos incluso que expresidentes panistas, fue un triunfo para la democracia mexicana.

Los datos dibujan un panorama esperanzador para las elecciones que se avecinan este 5 de junio en Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, en donde hay altas probabilidades de que el partido del presidente de México triunfe y destierre por fin a la mafia del poder que por años ha gobernado esas entidades.

Estas entidades han sido bastiones importantes del PRIAN por años, pero hoy tienen la oportunidad de sumarse a la transformación, de decir adiós a los años de corrupción y atropellos. Se espera alta participación y el triunfo rotundo de la izquierda obradorista, los resultados demostrarán que MORENA sigue siendo la principal fuerza política rumbo al 2024.

Presidenta de Que Siga la Democracia AC

Twitter: @GabyJimenezMX