/ martes 30 de marzo de 2021

Del discurso de la esperanza, a la desesperanza del discurso

Nuestro querido país lamentablemente parece dirigirse a sus límites críticos de sobrevivencia social y en el que la palabra esperanza se muestra tan inútil, tan frágil, tan sin importancia para 125 millones de mexicanos. El partido en el poder (MORENA) la manipulo como frase de campaña y de movilización humana, incluso propuso una transformación que a más de dos años de gestión nomás no llega. La cámara de los industriales resiente las respectivas consecuencias con caídas en inversión, cadenas de producción colapsadas, miles de pequeñas empresas en situación crítica o que finalmente no pudieron sobrevivir.

Lo anterior quedo de manifiesto durante los ochenta aniversarios de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación, en donde CANACINTRA confirmó su apuesta a ser una de las cámaras más dinámicas y actuantes del país. Por cierto, felicitamos al Ing. Enoch Castellanos por su ratificación como Presidente Nacional para el periodo 2021-2022, deseándole el mejor de los éxitos a él y a su Mesa Directiva.

Enoch Castellanos Férez, habló frente a los industriales y fue muy claro al criticar la actuación política, social y económica, sin dejar de lado la pésima estrategia de salud del gobierno federal. Recordó que ante las circunstancias, CANACINTRA fue el primer organismo en pedir ayuda a Presidencia de la República, sin pretender privilegios, ni grandes rescates, pero “ante (los) oídos sordos que encontramos en el gobierno federal”, un buen número de gobiernos estatales sí fueron sensibles y lograron implementar medidas.

Desde antes de la pandemia se veía un crecimiento negativo en la economía nacional, interrupción de proyectos y falta de claridad en la inversión, afirmó el presidente de CANACINTRA y reprochó al gobierno federal su abandono a las mipymes, que emplean a siete de cada 10 mexicanos. Ante el Covid-19, “a diferencia de casi todos los países del mundo, nuestro llamado de auxilio sigue sin ser escuchado”, y el sustento familiar para muchos, reprobó, se ha esfumado. Rechazó los programas con lógica electorera y afirmó que esperan acciones efectivas de vacunación para quienes llevan el sustento a sus familias.

No se puede gobernar bajo la nostalgia del ayer, como tampoco ver al futuro si no aprendimos del pasado. Tenemos que vivir de acuerdo a las circunstancias del hoy. Los industriales mexicanos y la sociedad en general tenemos la esperanza de un cambio real, para dejar atrás el sinuoso camino que el Sector ha tenido, bajo la administración del presidente, Andrés Manuel López Obrador.



Nuestro querido país lamentablemente parece dirigirse a sus límites críticos de sobrevivencia social y en el que la palabra esperanza se muestra tan inútil, tan frágil, tan sin importancia para 125 millones de mexicanos. El partido en el poder (MORENA) la manipulo como frase de campaña y de movilización humana, incluso propuso una transformación que a más de dos años de gestión nomás no llega. La cámara de los industriales resiente las respectivas consecuencias con caídas en inversión, cadenas de producción colapsadas, miles de pequeñas empresas en situación crítica o que finalmente no pudieron sobrevivir.

Lo anterior quedo de manifiesto durante los ochenta aniversarios de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación, en donde CANACINTRA confirmó su apuesta a ser una de las cámaras más dinámicas y actuantes del país. Por cierto, felicitamos al Ing. Enoch Castellanos por su ratificación como Presidente Nacional para el periodo 2021-2022, deseándole el mejor de los éxitos a él y a su Mesa Directiva.

Enoch Castellanos Férez, habló frente a los industriales y fue muy claro al criticar la actuación política, social y económica, sin dejar de lado la pésima estrategia de salud del gobierno federal. Recordó que ante las circunstancias, CANACINTRA fue el primer organismo en pedir ayuda a Presidencia de la República, sin pretender privilegios, ni grandes rescates, pero “ante (los) oídos sordos que encontramos en el gobierno federal”, un buen número de gobiernos estatales sí fueron sensibles y lograron implementar medidas.

Desde antes de la pandemia se veía un crecimiento negativo en la economía nacional, interrupción de proyectos y falta de claridad en la inversión, afirmó el presidente de CANACINTRA y reprochó al gobierno federal su abandono a las mipymes, que emplean a siete de cada 10 mexicanos. Ante el Covid-19, “a diferencia de casi todos los países del mundo, nuestro llamado de auxilio sigue sin ser escuchado”, y el sustento familiar para muchos, reprobó, se ha esfumado. Rechazó los programas con lógica electorera y afirmó que esperan acciones efectivas de vacunación para quienes llevan el sustento a sus familias.

No se puede gobernar bajo la nostalgia del ayer, como tampoco ver al futuro si no aprendimos del pasado. Tenemos que vivir de acuerdo a las circunstancias del hoy. Los industriales mexicanos y la sociedad en general tenemos la esperanza de un cambio real, para dejar atrás el sinuoso camino que el Sector ha tenido, bajo la administración del presidente, Andrés Manuel López Obrador.