Desde las campañas presidenciales del año pasado las redes sociales se convirtieron en un gran campo de batalla de dos bandos y con millones de espectadores que sufren los embates de los dos lados.
Por un lado los famosos chairos, poosedores de la verdad absoluta y maromeros, tal como los describen los fifís, quienes son gente acomodada y acostumbrada a que le roben los gobiernos tradicionales.
Esta batalla ha terminado con familias enteras, ha destrozado mas de una cena informal entre amigos y ha hecho que grupos unidos dejen de serlo, y sí, todo gira en torno al presidente, quien pese a ser el origen, no parece importarle mucho, pues abona a esta guerra como si el la dirigiera.
Y es que cada mañana, las declaraciones en la ya tradicional mañanera sirven como proyectiles para esta férrea guerra que se vive las 24 horas en las muy cómodas redes sociales sin mencionar lo que ha resultado en la vida real.
No vamos lejos, desde hace algunas semanas, uno de los argumentos, si es que se puede decir argumento, de los del lado del presidente es atacar a la prensa, ese mote de “chayoteros” que usan para referirse a todo aquel periodista que no aprueba sin chistar los dichos del mandatario, ha desvirtuado a muchísimos colegas.
No se trata de vestirnos de santos, pues como en todo, debe haber quien se sirve con la cuchara grande, eso es un hecho que no se puede esconder, pero de eso a linchar públicamente a algunos que son abiertamente disidentes a la 4T, fue de muy a gusto.
Y fue de mal gusto no por haberlos exhibido, sino por exhibir nada mas a quienes están abiertamente cuestionando y debatiendo todos sus dichos, en otras palabras, quienes no le son fieles servidores.
Televisoras y otros tantos, que eran afines al gobierno anterior y recibieron muchísimo dinero y que ahora, tal vez no es tanto, pero se vendieron al mejor postor, no aparecen en esa lista, que cabe aclarar, que dice el INAI que no le había llegado para cuando la publicó el periódico.
Será el sereno decía por ahí un personaje de la televisión comica mexicana, pero de que faltan muchos en esa lista, faltan muchos, pero ya son suficientes para calmar las fauces de los fieles por unos meses. Cortina de humo le llaman en mi pueblo.