Reforzar un acuerdo migratorio es importante, pero no hay que perder de vista el robustecer también la protección de los derechos humanos de quienes transitan por el territorio, particularmente de aquellos grupos más vulnerables.
Durante años México ha sido un país de tránsito, destino y retorno para miles de personas que buscan mejorar sus condiciones de vida, ya sea por cuestiones que obedecen a causas estructurales tales como la violencia o las condiciones de la pobreza en gran parte de los casos.
Sin duda, ante el incremento considerable y sostenido de migrantes al territorio, hoy se requiere de mayores mecanismos de atención y orientación para estos sectores, en especial para las mujeres y niños que solicitan atención a la salud, apoyo legal y refugio.
No hay que olvidar que en México, la Carta Magna reconoce de manera amplia y sin excepción las garantías de toda persona.
El artículo primero de la Constitucional Federal destaca de manera extensa el derecho de toda persona de gozar de las garantías reconocidas por el Estado Mexicano. Este reconocimiento implica que no sólo los nacionales gozarán de los mismos.
Ante esto, la población migrante, con independencia de su condición jurídica en el país, tiene garantizados todos sus derechos.
De igual manera, los derechos humanos de la población migrante son uno de los principios en los que se sustenta la Ley de Migración,publicada el 25 de mayo de 2011.
De acuerdo con las cifras más recientes de la Unidad dePolítica Migratoria de la Secretaría de Gobernación, en lo que va del año han sido detenidos en la frontera Norte de México 56 mil 278 menores de edad,número mayor al registrado en 2018, año que reportó a 31 mil 717 niñas, niños y adolescentes.
Las mujeres, según estadísticas del Instituto Nacional deEstadística y Geografía, en 2010 se registró a 961 mil 121 personas del sexo femenino migrantes en el país. Sólo ese año, el Instituto Nacional de Migración informó que la población extranjera residente en México alcanzó un total de 262mil 672 personas, de las cuales las mujeres representaron el 45 por ciento.
Actualmente no existe un único registro, pues se tiene en diversos casos, discrepancia entre las cifras oficiales y las de organizaciones nacionales e internacionales, según sean las fuentes consultadas.
La realidad, es que México tiene la obligación legal de proteger a los migrantes en cualquier situación. Desde la perspectiva del Instituto para las Mujeres en laMigración, AC, es necesario resaltar la visibilidad de las mujeres en la migración en el contexto mexicano a fin de poder propiciar los cambios necesarios en las políticas públicas que ayuden a resolver adecuadamente sus necesidades.
Asimismo, la experiencia nos dice que tenemos que trabajaren una integración económica de la región, atraer inversiones de otros países y generar mejores condiciones sociales y de seguridad.
