/ martes 5 de enero de 2021

Chamaquea el presidente a la IP

El anuncio del presidente Andrés Manuel López Obrador de que en un año todos los mexicanos estaremos vacunados, es una mentira más de las muchas que acumula en su haber. Lo dicho, a los actores de esta 4T o mejor dicho a nuestros políticos de cuarta, les ha quedado muy grande el saco y no han entendido que gobernar es toda una ciencia, mucho más compleja que simplemente oponerse o montar plantones en Reforma. Siendo realistas, México enfrentará muchos problemas para la inmunización masiva. Los conflictos comenzaron desde la corrupción que impera en la presente administración hasta la dispersión geográfica, pasando por la carencia de los frigoríficos necesarios, control de registros, idiosincrasia y claro, falta de personal médico que pueda vacunar masivamente a más de 138 millones de mexicanos.

El presidente sabe, y sabe muy bien, que la disponibilidad de la vacuna para atacar el COVID-19 solo podrá ser a través de su gobierno. El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, dijo que el gobierno de México no permitirá que particulares puedan vender la vacuna, a diferencia de Estados Unidos, donde se anunció la posibilidad de masificar su alcance a la población mediante su venta en cadenas de supermercados. El funcionario mexicano afirmo: !No, no, no! La vacuna será sólo administrada por parte del gobierno", por lo menos en esta etapa.

Ahora, en su más reciente declaración el presidente intenta nuevamente chamaquear a la IP, al difundir que “si habrá posibilidades para que el sector privado pueda vender la vacuna”, cuando, por un lado, todos los mexicanos observamos el tinte electoral que buscan dar a la aplicación y distribución de del medicamento y, por otro; cuando se habrá la venta a la IP nivel mundial, la industria tendrá que enfrentarse a las normas y burocracia de la COFEPRIS. Es decir, durante 2021 lamentablemente no habrá vacuna contra el virus en los hospitales privados, amén de la escases de muchos fármacos, dado que los laboratorios también buscan presionar y castigar al Gobierno mexicano, al dejar de surtir a la IP.

Como ya lo he dicho, este gobierno pretende seguir mintiendo y engañando a la gente, difunde de manera incorrecta las cosas. El influyentísimo en el Sector salud continua; familiares, amigos, el propio gabinete los beneficiados, los mexicanos afectados denuncian los hechos y no pasa nada. Mientras lastimosamente miles de personas mueren, se encuentran en estado grave o simplemente no tienen acceso a los medicamentos o a servicios de salud.


El anuncio del presidente Andrés Manuel López Obrador de que en un año todos los mexicanos estaremos vacunados, es una mentira más de las muchas que acumula en su haber. Lo dicho, a los actores de esta 4T o mejor dicho a nuestros políticos de cuarta, les ha quedado muy grande el saco y no han entendido que gobernar es toda una ciencia, mucho más compleja que simplemente oponerse o montar plantones en Reforma. Siendo realistas, México enfrentará muchos problemas para la inmunización masiva. Los conflictos comenzaron desde la corrupción que impera en la presente administración hasta la dispersión geográfica, pasando por la carencia de los frigoríficos necesarios, control de registros, idiosincrasia y claro, falta de personal médico que pueda vacunar masivamente a más de 138 millones de mexicanos.

El presidente sabe, y sabe muy bien, que la disponibilidad de la vacuna para atacar el COVID-19 solo podrá ser a través de su gobierno. El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, dijo que el gobierno de México no permitirá que particulares puedan vender la vacuna, a diferencia de Estados Unidos, donde se anunció la posibilidad de masificar su alcance a la población mediante su venta en cadenas de supermercados. El funcionario mexicano afirmo: !No, no, no! La vacuna será sólo administrada por parte del gobierno", por lo menos en esta etapa.

Ahora, en su más reciente declaración el presidente intenta nuevamente chamaquear a la IP, al difundir que “si habrá posibilidades para que el sector privado pueda vender la vacuna”, cuando, por un lado, todos los mexicanos observamos el tinte electoral que buscan dar a la aplicación y distribución de del medicamento y, por otro; cuando se habrá la venta a la IP nivel mundial, la industria tendrá que enfrentarse a las normas y burocracia de la COFEPRIS. Es decir, durante 2021 lamentablemente no habrá vacuna contra el virus en los hospitales privados, amén de la escases de muchos fármacos, dado que los laboratorios también buscan presionar y castigar al Gobierno mexicano, al dejar de surtir a la IP.

Como ya lo he dicho, este gobierno pretende seguir mintiendo y engañando a la gente, difunde de manera incorrecta las cosas. El influyentísimo en el Sector salud continua; familiares, amigos, el propio gabinete los beneficiados, los mexicanos afectados denuncian los hechos y no pasa nada. Mientras lastimosamente miles de personas mueren, se encuentran en estado grave o simplemente no tienen acceso a los medicamentos o a servicios de salud.