Este 5 de diciembre se cumple el 1er año de la Dra. Claudia Sheinbaum al frente del gobierno de la Ciudad de México, y, parece que los cambios prometidos en campaña aún no se reflejan en la percepción ciudadana.
El principal el de la inseguridad. Meses qué desde fuera del círculo político, nos parecieron desperdiciados con un Jesús Orta que pasó sin pena ni gloria, y la llegada de un muy bien recibido Omar García Harfuch, pero que después de la liberación de los aprehendidos en el operativo de Tepito, bajó sus bonos. Dicen que fue dentro del propio gobierno donde se le propinó el fuego amigo al actual Secretario.
Se cambiaron de patrullas y hasta de su color, pero parece que las mañas siguen siendo las mismas: corrupción en mandos superiores que permean hacía los distintos niveles de la corporación, traducido en lenguaje coloquial, siguen las mordidas, y lo más grave, la complicidad con la delincuencia. Sigue siendo pues, el talón de Aquiles de la administración morenista.
Que decir de la procuración de justicia, donde es un secreto a voces, que le preparan una salida a quien hasta ahora dio negativos resultados a la ciudadanía (no así a su grupo político, quien busca recompensarla). Ernestina Godoy, anticipan desde hace semanas, será la flamante Fiscal de la Ciudad de México.
Aún con todo lo que representaría este gobierno para la mujer, encabezado precisamente por mujeres destacadas, es uno de los grandes pendientes, que obligó a la Jefa de Gobierno, apenas hace unos días, decretar la alerta de violencia de género de la Ciudad de México. Sólo recordar las desafortunadas declaraciones de funcionarias cuando dijeron que eran falsas las acusaciones de secuestros a mujeres dentro del Metro.
Por último (por espacio de columna) de las mayores decepciones Andrés Lajous, donde el cambio que tanto anhelábamos los capitalinos ha sido nulo: desprecio a los vecinos, caos por taxistas y microbuseros, opacidad en parquímetros, entre otras finuras.
Mucho por hacer Dra. Sheinbaum, apóyese en el poder ciudadano, y no tanto en burócratas que desconocen la ciudad y su problemática.
@floresaquino
