/ domingo 19 de diciembre de 2021

Cambiar el Clima Impunemente

Se entiende por cambio climático la variación global del clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la atmósfera y llevaría al calentamiento global del planeta. Aunque la discusión científica seria se centra fundamentalmente en si este calentamiento puede ser efectivamente atribuido a actividades humanas o si es un proceso geológico natural como afirman grandes científicos e investigadores, el día de hoy hablaremos de algunos experimentos que se están echando a andar en el mundo para modificar el clima y supuestamente combatir el calentamiento global.

Uno de ellos es el anunciado a principios de año por Bill Gates quien quiere tapar el sol lanzando toneladas de polvo de carbonato de calcio a la atmósfera desde un centro espacial noruego. El proyecto denominado SCoPEX tiene como objetivo desviar parte de la luz solar fuera de la Tierra, y aunque esto fue predicho en 2018 en un capítulo de los Simpson donde el malvado Mr. Burns quería tapar la luz del sol para que Springfield se quedara a oscuras y sus habitantes tuvieran que usar la energía de su planta nuclear para enriquecerse cada vez más, las autoridades suecas le negaron la autorización a Mr. Gates para hacer el vuelo de prueba pues consideraron que aunque es de gran importancia combatir el calentamiento global, no hay aun suficientes evidencias científicas de las consecuencias de utilizar este tipo de geoingeniería.

Pero mientras Bill se pelea con los suecos para conseguir la autorización para su vuelo, desde 2008 en China se están haciendo una serie de experimentos para modificar el clima, como la siembra de nubes que se realiza mediante la dispersión de yoduro de plata en el cielo de Beijing y que habría contribuido a disminuir la contaminación de esta gran urbe asiática. También han utilizado ondas sonoras que interceptan el aire húmedo a gran altura con el objeto de modificar el clima en vastas regiones del país como Xianjiang y el Tibet. Los Emiratos Árabes también han entrado a la carrera de modificar el clima, haciéndolo a través de vuelos de drones que mediante impulsos eléctricos alteran el equilibrio de las nubes provocando la tan anhelada lluvia sobre sus desiertos. Durante las votaciones del Brexit cayó sobre Londres una lluvia torrencial que evitó que mucha gente saliera a votar, y se esparció el rumor de que estas lluvias habrían sido provocadas artificialmente para incidir en la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

Más allá de si es verdad o no el rumor sobre la lluvia del Brexit, vale la pena preguntarse cuáles serán las consecuencias sobre nuestras vidas a corto, mediano y largo plazo de la modificación artificial del clima que están empezando a hacer empresas y gobiernos con total impunidad, y si no es esto mucho más peligroso que el propio calentamiento global que dicen combatir.


Twitter: MarinievesGM @gm_marinieves


Se entiende por cambio climático la variación global del clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la atmósfera y llevaría al calentamiento global del planeta. Aunque la discusión científica seria se centra fundamentalmente en si este calentamiento puede ser efectivamente atribuido a actividades humanas o si es un proceso geológico natural como afirman grandes científicos e investigadores, el día de hoy hablaremos de algunos experimentos que se están echando a andar en el mundo para modificar el clima y supuestamente combatir el calentamiento global.

Uno de ellos es el anunciado a principios de año por Bill Gates quien quiere tapar el sol lanzando toneladas de polvo de carbonato de calcio a la atmósfera desde un centro espacial noruego. El proyecto denominado SCoPEX tiene como objetivo desviar parte de la luz solar fuera de la Tierra, y aunque esto fue predicho en 2018 en un capítulo de los Simpson donde el malvado Mr. Burns quería tapar la luz del sol para que Springfield se quedara a oscuras y sus habitantes tuvieran que usar la energía de su planta nuclear para enriquecerse cada vez más, las autoridades suecas le negaron la autorización a Mr. Gates para hacer el vuelo de prueba pues consideraron que aunque es de gran importancia combatir el calentamiento global, no hay aun suficientes evidencias científicas de las consecuencias de utilizar este tipo de geoingeniería.

Pero mientras Bill se pelea con los suecos para conseguir la autorización para su vuelo, desde 2008 en China se están haciendo una serie de experimentos para modificar el clima, como la siembra de nubes que se realiza mediante la dispersión de yoduro de plata en el cielo de Beijing y que habría contribuido a disminuir la contaminación de esta gran urbe asiática. También han utilizado ondas sonoras que interceptan el aire húmedo a gran altura con el objeto de modificar el clima en vastas regiones del país como Xianjiang y el Tibet. Los Emiratos Árabes también han entrado a la carrera de modificar el clima, haciéndolo a través de vuelos de drones que mediante impulsos eléctricos alteran el equilibrio de las nubes provocando la tan anhelada lluvia sobre sus desiertos. Durante las votaciones del Brexit cayó sobre Londres una lluvia torrencial que evitó que mucha gente saliera a votar, y se esparció el rumor de que estas lluvias habrían sido provocadas artificialmente para incidir en la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

Más allá de si es verdad o no el rumor sobre la lluvia del Brexit, vale la pena preguntarse cuáles serán las consecuencias sobre nuestras vidas a corto, mediano y largo plazo de la modificación artificial del clima que están empezando a hacer empresas y gobiernos con total impunidad, y si no es esto mucho más peligroso que el propio calentamiento global que dicen combatir.


Twitter: MarinievesGM @gm_marinieves