/ viernes 10 de julio de 2020

Años débiles

Es un hecho que la expectativa de vida de los mexicanos aumentó de manera considerable en las últimas décadas, pero por carecer de una nutrición adecuada y actividad física vio mermada su calidad de vida. Este 11 de julio al celebrar el Día Mundial de la Población en medio de una pandemia que afecta a la población, habrá que reflexionar del por qué nos hacemos débiles con los años.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2018, en ese momento había 125 millones de personas residente en México: 51.1% son mujeres y 48.9 son hombres. Y el tema de la salud, como lo hemos dicho desde hace varios años en esta columna, es un factor que involucra a todos.

La citada encuesta establece: De las 722,611 defunciones registradas en 2018, la mayoría fueron en hombres (56.4%) y por edad, 63.8% correspondieron a personas de 60 años o más. Las tres principales causas de muerte en el país son las enfermedades isquémicas del corazón (15%), la diabetes mellitus (14%) y las enfermedades del hígado (5.5%). Aunque las principales causas de muerte cambian en edades más jóvenes, las enfermedades crónicas degenerativas dominan en los grupos más avanzados de edad.

Así una y otra vez nos tienen en jaque enfermedades que quizás no debieron ser tan letales con una dieta balanceada y ejercicio como un estilo de vida.

Ahora también, está el tema recurrente de la inseguridad, la gente ya no sale al parque a la calle a hacer ejercicio por los asaltos; también es complicado que los menores salgan a los parques sin la supervisión de un adulto; muchos de estos es espacios son copados por individuos del crimen organizado. Otro factor es que el mexicano pasa más tiempo frente al televisor o cualquier dispositivo electrónico y lleva una vida sedentaria.

La encuentra también indica: La transición epidemiológica experimentada en el país durante el siglo pasado ha hecho que la población tenga una mayor esperanza de vida. De acuerdo con las proyecciones del CONAPO, en 1970 el promedio de vida al nacer era de 59.9 años y aumentó a 75.2 años en 2020 (CONAPO, s.f.). La prolongación de la vida ha hecho que los fallecimientos se centren en edades avanzadas y por enfermedades crónicas degenerativas.

Textualmente hay que decirlo: El mexicano elevó su expectativa de vida, pero decreció la calidad de ésta. Este encierro nos debe llevar no sólo a reflexionar, sino a iniciar acciones para vivir mejor y que los años no nos hagan débiles.

En Twitter @TXTUALes 10-julio-2020.


Es un hecho que la expectativa de vida de los mexicanos aumentó de manera considerable en las últimas décadas, pero por carecer de una nutrición adecuada y actividad física vio mermada su calidad de vida. Este 11 de julio al celebrar el Día Mundial de la Población en medio de una pandemia que afecta a la población, habrá que reflexionar del por qué nos hacemos débiles con los años.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2018, en ese momento había 125 millones de personas residente en México: 51.1% son mujeres y 48.9 son hombres. Y el tema de la salud, como lo hemos dicho desde hace varios años en esta columna, es un factor que involucra a todos.

La citada encuesta establece: De las 722,611 defunciones registradas en 2018, la mayoría fueron en hombres (56.4%) y por edad, 63.8% correspondieron a personas de 60 años o más. Las tres principales causas de muerte en el país son las enfermedades isquémicas del corazón (15%), la diabetes mellitus (14%) y las enfermedades del hígado (5.5%). Aunque las principales causas de muerte cambian en edades más jóvenes, las enfermedades crónicas degenerativas dominan en los grupos más avanzados de edad.

Así una y otra vez nos tienen en jaque enfermedades que quizás no debieron ser tan letales con una dieta balanceada y ejercicio como un estilo de vida.

Ahora también, está el tema recurrente de la inseguridad, la gente ya no sale al parque a la calle a hacer ejercicio por los asaltos; también es complicado que los menores salgan a los parques sin la supervisión de un adulto; muchos de estos es espacios son copados por individuos del crimen organizado. Otro factor es que el mexicano pasa más tiempo frente al televisor o cualquier dispositivo electrónico y lleva una vida sedentaria.

La encuentra también indica: La transición epidemiológica experimentada en el país durante el siglo pasado ha hecho que la población tenga una mayor esperanza de vida. De acuerdo con las proyecciones del CONAPO, en 1970 el promedio de vida al nacer era de 59.9 años y aumentó a 75.2 años en 2020 (CONAPO, s.f.). La prolongación de la vida ha hecho que los fallecimientos se centren en edades avanzadas y por enfermedades crónicas degenerativas.

Textualmente hay que decirlo: El mexicano elevó su expectativa de vida, pero decreció la calidad de ésta. Este encierro nos debe llevar no sólo a reflexionar, sino a iniciar acciones para vivir mejor y que los años no nos hagan débiles.

En Twitter @TXTUALes 10-julio-2020.