/ viernes 21 de enero de 2022

¿Amenazas o sometimiento?

Se han vuelto muy recurrentes las visitas y encuentros del Presidente Andrés Manuel López Obrador con funcionarios de primer nivel del gobierno de Estados Unidos.

¿Cuáles son las razones de fondo para ese tipo de encuentros, en su mayoría privados, y después sólo posan para la foto?

El Presidente siempre ha dicho que hay una relación excelente con la Casa Blanca.

Sin embargo, hay episodios que indican el uso de “guante de seda con puño de hierro” por parte del gobierno de Joe Biden hacia México.

Desde el triunfo de Biden –tras derrotar a Donald Trump-, López Obrador tardó en reconocer su victoria.

Se esperaba que en el corto plazo hubiera reacciones por el desdén del gobierno de México hacia el estadounidense.

Lejos de eso, aquí continuaron los desplantes hacia el país más poderoso del planeta.

En la primera conversación con Biden, López Obrador colocó tras de él un busto de Francisco Villa, el único extranjero que invadió con tropas suelo norteamericano.

El 20 de noviembre, Aniversario de la Revolución Mexicana, sorprendió que el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel haya sido el invitado de honor.

Pero no sólo eso, ofreció un discurso, mientras el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar presenciaba el momento en la última fila.

Durante la reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), López Obrador invitó al líder chino Xi Jinping a dar un mensaje videograbado.

Ello no tendría nada especial, si no es porque Jinping no tiene nada que ver con la región latinoamericana y del Caribe.

Adicionalmente, el mandatario mexicano invitó al presidente Nicolás Maduro a la reunión de la CELAC, y a tropas de Venezuela a marchar por las calles de la Ciudad de México.

Incluso, hay hechos que no son aceptados por el gobierno del vecino país del norte, como la liberación de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán.

Una respuesta contundente del gobierno de Biden fue haber ofrecido 5 millones de dólares por la captura de los hijos de El Chapo.

Adicionalmente, tienen presente que en la Organización de Estados Americanos (OEA), hay denuncias de la participación del crimen organizado en el proceso electoral de 2021.

Con el mismo tema que incluye secuestros y atentados también hay denuncias ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Incluso, son constantes las visitas de López Obrador a Sinaloa, especialmente a Badiraguato, cuna de los principales líderes del narcotráfico, en especial de El Chapo.

El gobierno federal también ha destinado una millonaria inversión para la construcción de una carretera y una universidad en esas tierras.

Ese es el panorama de la relación del gobierno de López Obrador con el de Biden.

¿A qué vienen los funcionarios de primer nivel del gobierno de Estados Unidos?

¿Qué hay detrás de todos esos encuentros? ¿Advertencias? ¿Amenazas? ¿O sometimiento?

PROSPECCIÓN… Continúa el reforzamiento de la Secretaría de Gobierno de la Ciudad de México a cargo de Martí Batres, con la designación de Dunia Ludlow y Manuel Oropeza, como titulares de la subsecretaría de Programas de Alcaldías y Reordenamiento de Vía Pública y de la Autoridad del Centro Histórico. Oropeza es incondicional de René Bejarano y Dolores Padierna.

Twitter: @JoelSaucedo

saucedosj@yahoo.com.mx

Se han vuelto muy recurrentes las visitas y encuentros del Presidente Andrés Manuel López Obrador con funcionarios de primer nivel del gobierno de Estados Unidos.

¿Cuáles son las razones de fondo para ese tipo de encuentros, en su mayoría privados, y después sólo posan para la foto?

El Presidente siempre ha dicho que hay una relación excelente con la Casa Blanca.

Sin embargo, hay episodios que indican el uso de “guante de seda con puño de hierro” por parte del gobierno de Joe Biden hacia México.

Desde el triunfo de Biden –tras derrotar a Donald Trump-, López Obrador tardó en reconocer su victoria.

Se esperaba que en el corto plazo hubiera reacciones por el desdén del gobierno de México hacia el estadounidense.

Lejos de eso, aquí continuaron los desplantes hacia el país más poderoso del planeta.

En la primera conversación con Biden, López Obrador colocó tras de él un busto de Francisco Villa, el único extranjero que invadió con tropas suelo norteamericano.

El 20 de noviembre, Aniversario de la Revolución Mexicana, sorprendió que el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel haya sido el invitado de honor.

Pero no sólo eso, ofreció un discurso, mientras el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar presenciaba el momento en la última fila.

Durante la reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), López Obrador invitó al líder chino Xi Jinping a dar un mensaje videograbado.

Ello no tendría nada especial, si no es porque Jinping no tiene nada que ver con la región latinoamericana y del Caribe.

Adicionalmente, el mandatario mexicano invitó al presidente Nicolás Maduro a la reunión de la CELAC, y a tropas de Venezuela a marchar por las calles de la Ciudad de México.

Incluso, hay hechos que no son aceptados por el gobierno del vecino país del norte, como la liberación de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán.

Una respuesta contundente del gobierno de Biden fue haber ofrecido 5 millones de dólares por la captura de los hijos de El Chapo.

Adicionalmente, tienen presente que en la Organización de Estados Americanos (OEA), hay denuncias de la participación del crimen organizado en el proceso electoral de 2021.

Con el mismo tema que incluye secuestros y atentados también hay denuncias ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Incluso, son constantes las visitas de López Obrador a Sinaloa, especialmente a Badiraguato, cuna de los principales líderes del narcotráfico, en especial de El Chapo.

El gobierno federal también ha destinado una millonaria inversión para la construcción de una carretera y una universidad en esas tierras.

Ese es el panorama de la relación del gobierno de López Obrador con el de Biden.

¿A qué vienen los funcionarios de primer nivel del gobierno de Estados Unidos?

¿Qué hay detrás de todos esos encuentros? ¿Advertencias? ¿Amenazas? ¿O sometimiento?

PROSPECCIÓN… Continúa el reforzamiento de la Secretaría de Gobierno de la Ciudad de México a cargo de Martí Batres, con la designación de Dunia Ludlow y Manuel Oropeza, como titulares de la subsecretaría de Programas de Alcaldías y Reordenamiento de Vía Pública y de la Autoridad del Centro Histórico. Oropeza es incondicional de René Bejarano y Dolores Padierna.

Twitter: @JoelSaucedo

saucedosj@yahoo.com.mx