/ sábado 4 de septiembre de 2021

A la mitad del sexenio

De acuerdo a lo establecido en la Constitución, la apertura del periodo ordinario de sesiones del Congreso, da pauta para que el presidente Andrés Manuel López Obrador presente, en este caso, su tercer informe acerca del estado que guarda la administración pública que encabeza.

Entre los grandes logros del presidente de México enmarcados a la mitad de su mandato, se cuentan los récords históricos en: inversión extranjera, incremento al salario mínimo, la no devaluación del peso, no incremento de deuda, el aumento del índice de la Bolsa de Valores y en las reservas del banco central.

Como lo establecen los indicadores, las actividades económicas como el comercio, el turismo y los servicios, están recuperándose. El pronóstico de la economía mexicana es que crezca este año alrededor del 6% sin tener que recurrir a deuda, sin devaluar el peso. Además se toman previsiones para estabilizar la inflación, aumentar un 44% en términos reales el salario mínimo y la recuperación de un millón 202 mil 691 empleos perdidos por la pandemia.

A la mitad del camino se debe destacar el trabajo de autoridades y ciudadanía para encarar las graves afectaciones producidas por la pandemia, tales como la campaña nacional de vacunación donde se movilizo a todo el aparato gubernamental, al sistema de salud y a la sociedad frente a una crisis para la cual no existía preparación posible. Esta acción merece mayor reconocimiento debido a la situación de desatención en la que se encontraban las instancias de salud pública.

Se debe reconocer que este gobierno revirtió la visión privatizadora que por décadas prevaleció en las esferas del poder público. Hoy impera la perspectiva de beneficio social contrarrestando al individualismo y el enriquecimiento de unos cuantos.

Se sigue en el trabajo arduo para fortalecer los esfuerzos oficiales para erradicar totalmente la corrupción que infecta a las instituciones. Asimismo, las acciones para enfrentar la violencia delictiva continúan, dotando de capacitación, elementos y con reformas que generan las condiciones de estabilidad que tanto añoramos. Estamos hacia el camino, en 3 años se ha sanado lo que en décadas no observamos.

Estamos a la mitad de la consolidación de un movimiento social, donde se consiga la transformación de las instituciones electorales y judiciales heredadas, las cuales han servido para saciar apetitos monetarios particulares a expensas del erario.

Estamos seguros de que, a la par de las acciones gubernamentales, se continuarán garantizando aspectos fundamentales, como la participación popular directa en la toma de decisiones en todos los niveles y en todos los procesos del país. De esta manera, este gobierno se sigue legitimando.

De acuerdo a lo establecido en la Constitución, la apertura del periodo ordinario de sesiones del Congreso, da pauta para que el presidente Andrés Manuel López Obrador presente, en este caso, su tercer informe acerca del estado que guarda la administración pública que encabeza.

Entre los grandes logros del presidente de México enmarcados a la mitad de su mandato, se cuentan los récords históricos en: inversión extranjera, incremento al salario mínimo, la no devaluación del peso, no incremento de deuda, el aumento del índice de la Bolsa de Valores y en las reservas del banco central.

Como lo establecen los indicadores, las actividades económicas como el comercio, el turismo y los servicios, están recuperándose. El pronóstico de la economía mexicana es que crezca este año alrededor del 6% sin tener que recurrir a deuda, sin devaluar el peso. Además se toman previsiones para estabilizar la inflación, aumentar un 44% en términos reales el salario mínimo y la recuperación de un millón 202 mil 691 empleos perdidos por la pandemia.

A la mitad del camino se debe destacar el trabajo de autoridades y ciudadanía para encarar las graves afectaciones producidas por la pandemia, tales como la campaña nacional de vacunación donde se movilizo a todo el aparato gubernamental, al sistema de salud y a la sociedad frente a una crisis para la cual no existía preparación posible. Esta acción merece mayor reconocimiento debido a la situación de desatención en la que se encontraban las instancias de salud pública.

Se debe reconocer que este gobierno revirtió la visión privatizadora que por décadas prevaleció en las esferas del poder público. Hoy impera la perspectiva de beneficio social contrarrestando al individualismo y el enriquecimiento de unos cuantos.

Se sigue en el trabajo arduo para fortalecer los esfuerzos oficiales para erradicar totalmente la corrupción que infecta a las instituciones. Asimismo, las acciones para enfrentar la violencia delictiva continúan, dotando de capacitación, elementos y con reformas que generan las condiciones de estabilidad que tanto añoramos. Estamos hacia el camino, en 3 años se ha sanado lo que en décadas no observamos.

Estamos a la mitad de la consolidación de un movimiento social, donde se consiga la transformación de las instituciones electorales y judiciales heredadas, las cuales han servido para saciar apetitos monetarios particulares a expensas del erario.

Estamos seguros de que, a la par de las acciones gubernamentales, se continuarán garantizando aspectos fundamentales, como la participación popular directa en la toma de decisiones en todos los niveles y en todos los procesos del país. De esta manera, este gobierno se sigue legitimando.